Cuatro jóvenes actores iberoamericanos exploran las experiencias humanas en "De motu proprio", una obra que recrea situaciones que pueden ser comunes tanto en una relación conyugal como en una vida de solteros y que encaja perfectamente en la actual sociedad española.

Dos argentinos, un chileno y una española protagonizan esta pieza teatral, que se estrena hoy en la Sala Plot Point de Madrid.

La historia, que también se presentará mañana, así como el 6 y 12 de septiembre, transcurre en el hogar de Nela y "el gordo", una pareja que tiene un amigo soltero a quien llaman "el flaco", y a quien presentan a "Laura", un amiga de ambos, para que se hagan novios.

Hasta ahí todo bien, "sin embargo, una discusión conyugal desata una situación que se escapa de las manos", adelantó el argentino Luis Almeida, director de la obra, en una entrevista con Efe.

Por su parte, Germán Fabre, que interpreta al amigo soltero, sostuvo que lo que más le gusta de esta escenificación "es expresar la buena voluntad de las personas, aunque a veces podamos provocar que las cosas se nos vayan de las manos, sin querer, ya que creo que nadie elige estar en medio de situaciones inoportunas".

La iniciativa de montar esta trama partió justamente de este actor argentino que reside en España y para quien esta obra y su papel de "el flaco" - apelativo muy típico en la tierra de Gardel- significa una vuelta a las tablas, después de mucho tiempo dedicado a otros oficios.

"Fue mi necesidad de hacer teatro, ahora que me siento en casa, después de vivir siete años y medio en España", relató Fabre, quien agradece haber encontrado amigos actores que tenían la misma inquietud.

El actor se refiere a Vanesa Castellanos, la española que interpreta a "Nela"; el chileno Rodrigo Villarán, que hace el papel de "el gordo", y su compatriota Carolina Touceda, que representa a "Laura".

"Es una creación colectiva que se fue alimentando con las improvisaciones y anécdotas de cada uno", relató Almeida.

"De motu proprio", que en 45 minutos entrelaza los sentimientos e intereses de sus protagonistas, es también la primera obra de "Gluten Free Company", la productora que creó Germán, con el fin de aportar al teatro independiente una visión de un mundo real y sin fronteras.

Esta intención puede percibirse en esta obra a través de su diálogo coloquial, donde además de los apelativos, se respetan los "modismos" propios de la nacionalidad de cada actor, haciendo de ésta una historia cercana a la vida en las grandes ciudades como Madrid.