La jueza de instrucción 21 de Valencia, Nieves Molina, ha citado para que declaren como imputados el próximo 17 de junio a tres técnicos de la empresa de Ferrocarriles de la Generalidad de Valencia implicados en la colocación y programación de las balizas de frenado del metro y que hubieran podido evitar el accidente de 2006, que causó la muerte de 43 personas y heridas a otras 47.

La jueza cita a los trabajadores de FGV que participaron en el año 1999 en el proyecto de colocación de balizas en el trazado de la Línea 1, en una curva de la estación de Jesús donde se produjo el descarrilamiento del tren el 3 de julio de 2006.

En concreto cita como imputados al director de Explotación, al director Técnico y al Jefe de la Diec, al entender que eran los responsables de la colocación y revisión de las balizas de frenado automático de los trenes cuando exceden la velocidad permitida.

La jueza ha dictado un auto, que sigue lo dispuesto por la Audiencia Provincial de Valencia el pasado 1 de enero cuando ordenó reabrir el caso al estimar parcialmente los recursos de apelación interpuestos contra el archivo del sumario.

La Audiencia apuntó a una serie de diligencias que el juzgado debía practicar para aclarar las circunstancias del siniestro y de su posterior investigación.

En la parte dispositiva del mismo, entre las diligencias ordenadas, se encuentra la que requiere que FGV informe sobre las personas que en la fecha del accidente eran responsables de colocar, revisar y decidir las características técnicas de las balizas de limitación de velocidad automática instaladas en el tramo de la Plaza de España a Jesús.

La jueza interpreta esta resolución de la Audiencia como que no existe obstáculo procesal para volver a incidir sobre cuestiones que ya habían sido resueltas respecto a la colocación y ubicación de las balizas, así como la ausencia de una de ellas que controlase la velocidad del tren en la entrada en la curva