El escritor Julià de Jòdar ha ganado hoy el XVI Premio Carlemany de Novela, dotado con 42.000 euros, con la obra "La pastoral catalana", en la que hace una radiografía de un mundo en crisis y de una sociedad catalana vulnerable ante una situación que no comprende y que la sobrepasa.

El premio está convocado por el Gobierno de Andorra, Fundación Enciclopèdia Catalana y las editoriales Proa y Columna y se editará en enero de 2010 bajo el sello de Ediciones Proa.

El libro representa un cambio estilístico en la literatura de De Jòdar (Badalona, 1942), quien ha explicado que ha dejado con él "los excesos constructivos de otras novelas", permitiendo que "su propio instinto le guíe en el relato".

La novela tiene muchos elementos de crónica cotidiana, hace referencia a "las personas que te encuentras en el aeropuerto o en la calle" y deja aflorar temores de una época de crisis de paro, en la que "no hay ideologías a las que agarrarse".

La obra narrativa de De Jòdar parte de una intensa documentación que más tarde canaliza a través de unos escenarios y personajes muy elaborados y el libro ganador del Carlemany tiene como protagonista a un periodista.

De Jòdar ha descrito su personaje como "un antiguo progre que acepta la realidad tal y como es y se enfrenta a un fantasma de su pasado antiimperialsita, revisa su historia y se encuentra ante sus miserias".

"La pastoral catalana", a través de un juego de espejos, retrata a una generación que bajo una fachada de integridad había pretendido cambiar el mundo sin bastante valentía ni humildad.

Sus personajes son héroes derrotados, parejas que se ven reflejadas en el fracaso del otro descritas con humanidad y carácter alegórico a través de la vicisitudes de una pareja catalana que viaja a Miami con la intención de ayudar a una amiga.

El título del libro remite a la novela de Philip Roth "Pastoral americana", escritor que De Jòdar admira, a la que rinde homenaje, y "relaciona el desencanto del sueño americano con el nuestro", ha explicado el escritor.

Una pastoral es, a juicio de De Jòdar, "una manera de pasar cuentas de manera irreverente e irónica al estado del bienestar, convertido en estado del malestar".

Novela contemporánea, en ella se citan hechos recientes como la campaña de Barack Obama o formas de vida de la gente pobre de Estados Unidos, "y de paso de la catalana", y ofrece "una mirada compasiva hacia lo que viene detrás y a los que recibirán un mundo peor".

De Jòdar ha ganado el premio, uno de los cuatro mejores dotados de la literatura catalana, por unanimidad, entre los diecisiete originales presentados.

La secretaria de Cultura del Gobierno de Andorra, Clara Vives, ha recordado los dieciséis años de tradición del premio con el que Andorra, a pesar de su demografía limitada, contribuye a la cultura catalana.

Albert Pélach, director de la Fundació Enciclopedia Catalana, ha agradecido el compromiso renovado del nuevo gobierno andorrano con el premio, que "es el que tiene más vocación internacional" de los de las comunidades de cultura catalana.

Por su parte, De Jòdar ha señalado a Efe que la dotación del premio representa para él "un seguro para continuar escribiendo".

El premio Carlemany viene a añadirse a los ya obtenidos por el escritor, quien recibió en 2005 el Sant Jordi con "El metall impur" y en 2001 el "Premio de la crítica-narrativa catalana" con "El trànsit de les fades".