En cada entrevista hace lo posible por evitar que las preguntas sobre su enfermedad predominen sobre las de su trabajo, pero Luz Casal "está bien", y ha intentado buscar un equilibrio personal y una armonía que, dice, "no se consiguen ni con la edad ni con la experiencia".

Y es que, a pesar de las circunstancias que la alejaron de los escenarios durante 2007, por un cáncer de mama que ha superado, Luz tiene claro que una persona "puede ser equilibrada sin haber pasado por problemas", ya que todo depende "de la personalidad y la cultura de cada uno", ha asegurado en una entrevista concedida hoy a Efe.

"Su" normalidad, en la que se encuentra sumergida en este momento, puesto que lleva más de tres meses de gira, es "la mejor cura", y reconoce que en determinados momentos "hay que saber reencontrarse con la rutina y con la gente que configura tu día a día".

Sin embargo, "hay que saber estar en soledad y no tener ninguna necesidad efectiva", aunque una cosa, ha matizado, es "tener ganas de conseguir cosas" y otra la realidad, reconocer "que eres una persona frágil".

El pasado 11 de noviembre salió a la venta su undécimo disco, "Vida tóxica", que fue configurando entre sesión y sesión del tratamiento de quimioterapia que ayudó a que ahora haya podido volver a los escenarios.

Dos meses más tarde de este lanzamiento, la ciudad de Elda (Alicante) fue testigo de su vuelta al directo y de su voz, que la cantante gallega considera el instrumento "más importante" para la evolución de una persona.

No obstante, Luz reconoce que muchas veces consigue expresar sus sentimientos "más íntimamente" por las canciones que por medio de una conversación, ya que "muchas veces no sé para qué hablo", ha bromeado.

Desde el inicio de su trayectoria musical, que a punto está de cumplir 30 años, Luz Casal ha grabado canciones convertidas en éxitos indiscutibles, como "Entre mis recuerdos", "No me importa nada" y "Te dejé marchar", y desea seguir haciendo "muchas más bandas sonoras de la vida de las personas", canciones "que perduren", ha dicho.

A la pregunta de si posee un "sexto sentido" para saber si una de sus nuevas canciones será un éxito, con "Piensa en mí" y "Un año de amor", ambas incluidas en la película "Tacones lejanos" de Pedro Almodóvar, ha asegurado haber tenido ese "convencimiento", aunque también supo que había hecho una cosa "muy buena pero arriesgada".

Sobre sus próximos proyectos, además de continuar su gira, el próximo 27 de junio tendrá lugar en Málaga un concierto que ella ha denominado "muy especial" y del que quiere llevar las riendas, "sin dejarlo en manos de ningún promotor".

Con varios invitados "especiales", los beneficios recaudados de este espectáculo irán destinados a la Fundación Imabis, dedicada a la investigación del cáncer.

Además, el que será su nuevo disco, que ya está en camino, estará dedicado a canciones clásicas, pero "no muy manoseadas", ha aclarado.