A sus 91 años, Manuel Alexandre, "uno de los principales símbolos de nuestro cine" en palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha recibido hoy en el Palacio de la Moncloa la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio.

Emocionado hasta las lágrimas, el actor, "un superviviente de una estirpe maravillosa de actores", según Zapatero, ha sido homenajeado en un acto al que han asistido actores y actrices como Marisa Paredes, Juan Diego, Alvaro Luna e incluso "El Langui", cineastas como José Luis Cuerda, Javier Fesser, Manuel Gómez Pereira y otros representantes del sector.

"Nunca he tenido tanta emoción", ha comentado el actor tras recibir la Gran Cruz de manos del presidente del Gobierno, acompañado por los ministros de Cultura, César Antonio Molina, y de Educación, Mercedes Cabrera.

Una larga ovación de sus compañeros ha acompañado sus palabras y el documental que se ha proyectado sobre sus casi sesenta años de trayectoria artística, en la que este actor ha participado en casi doscientas películas, como "Bienvenido Mr Marshall", de Luis García Berlanga", "Cómicos", de Juan Antonio Bardem, o "El año de las luces", de Fernando Trueba.

En su discurso, el presidente del Gobierno ha señalado que, "si los actores son el espejo de un país, cuando nos miramos en Manuel Alexandre vemos no sólo su rostro, sino también una parte de nuestra historia, de nuestra cultura y de nuestra propia vida".

Zapatero ha recordado que Manuel Alexandre es "un superviviente de una estirpe maravillosa de actores, los cómicos" que supieron desarrollar su trabajo en tiempos difíciles.

"¿Quién iba a imaginar en aquella posguerra llena de privaciones, con tres funciones diarias, viajes infinitos por carreteras de tercera, que vuestros herederos, vuestros nietos, iban a subir a recoger dos Oscar de Hollywood?", ha apuntado el presidente.

Zapatero ha deseado que la "unanimidad del cariño" que el actor despierta "se vuelque sobre todo el cine español", al que representa porque es "un actor del pueblo y para el pueblo" que "nos ha hecho reír, emocionarnos o sentir tristeza del que sufre".

El jefe del Ejecutivo, que en su discurso ha recordado que mañana se celebra el Día Internacional del Teatro, ha hecho extensivo el homenaje a todos los actores y ha alabado su "capacidad de reinventarse" y de "luchar para hacer frente a los retos".

El acto ha emocionado también a algunos de los invitados, como Álvaro de Luna, uno de los más íntimos amigos de Manuel Alexandre, quien ha destacado cómo su compañero es, como decía Fernando Fernán Gómez, otro de sus más cercanos, "el actor de más vocación" que ha conocido, hasta el punto de que, pese a su edad, acaba de protagonizar dos películas y aún piensa en hacer una comedia en el teatro.

"Todavía practica con la lengua ejercicios para la proyección de la voz", explicaba de Luna, destacando que admira la "limpieza sin recovecos" de Alexandre, un actor que, para Marisa Paredes, es una lección de "vitalidad, entrega y humildad que jamás ha presumido de nada, siendo como es una pieza fundamental del cine español".