La cantante estadounidense Mariah Carey aseguró hoy que perdió casi 14 kilos en apenas tres meses después de dar a luz a gemelos el pasado abril y reveló que durante el embarazo engordó tanto que no quería conocer su peso.

"Como no tengo una báscula en casa, fui a una clínica con mi dietista, pero no tuve valor para mirar la cifra, y ella tuvo que hacerlo por mí", declaró Carey durante un acto promocional de un programa de adelgazamiento en Nueva York.

La artista señaló que estar embarazada de gemelos le provocó un edema (retención de líquidos) tan importante que llegó a pensar que nunca recuperaría su figura, e incluso después tuvo que "aprender a andar de nuevo de manera correcta".

Carey, de 41 años, dijo que la primera semana después de alumbrar a los pequeños Moroccan y Monroe perdió gran cantidad de los líquidos acumulados durante al gestación.

El nacimiento de los pequeños por cesárea le impidió hacer ejercicio durante un mes y medio, periodo en el que dio el pecho a los bebés, relató la artista.

Una vez recuperada de la cesárea, la actriz decidió someterse al programa de adelgazamiento al que ahora presta su imagen, con el que asegura que perdió 14 kilos en tres meses.

"Realmente no me preocupa no estar esquelética, siempre he sido una chica grande, pero quiero estar segura de que voy a lucir bien en el bikini que quiera", indicó la cantante, quien a lo largo de su carrera ha vendido más de 150 millones de discos.

La intérprete de canciones como "Hero" y ganadora de varios premios Grammy dio a luz el pasado 30 de abril en un hospital de Los Angeles a Morrocan y Monroe, un niño y una niña fruto de su matrimonio con el rapero y actor Nick Cannon, de 31 años y con quien lleva casada desde 2008.