Público
Público

Merkel cede y habrá cumbre sobre Grecia

Los ministros del euro se reunirán el jueves.

D.BASTEIRO/D.BARREIRO

La cumbre más esperada ya tiene fecha. Cuando los ministros de Finanzas europeos estaban volcados en analizar los resultados de las pruebas de la banca, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, anunció, a través de las redes sociales, la convocatoria de una cumbre extraordinaria para el próximo jueves. “Nuestro orden del día será la estabilidad económica de la zona euro en su conjunto y la financiación futura del programa de Grecia”, aseguró.

Urge una solución porque las primas de riesgo volvieron ayer a nivel récord

Van Rompuy llevaba días tratando de convencer a los líderes de Alemania y un grupo de países satélites integrado por Holanda, Finlandia y Austria de la necesidad de convocar esta reunión.

La cumbre ya no tratará sólo de desbloquear el segundo rescate de Grecia, motivo de un agrio enfrentamiento entre Alemania y el BCE, institución a la que apoyan Francia y los países más acorralados por los mercados.

Además, los líderes tratarán de enviar una señal definitiva a los mercados sobre la fortaleza del euro y su capacidad para resolver sus propios problemas. Fuentes cercanas al presidente del Consejo reconocieron que hasta el jueves las negociaciones deberán resolver un sinfín de complejidades técnicas y sobre todo políticas, pero agradecieron con ironía que “los 17 hayan encontrado al fin una fecha en la que reunirse, algo que no es fácil por sus complicadas agendas”.

En realidad, la canciller Angela Merkel había bloqueado la celebración de la cumbre exigiendo como “precondición” que las negociaciones sobre “el programa de Grecia” hubiesen “finalizado” antes de citarse. Las palabras fueron interpretadas como un enroque en la posición de Alemania, que quiere que el sector privado se haga cargo de una gran parte del rescate griego a pesar de las advertencias sobre el riesgo de que se traduzca como un impago de Grecia y genere todavía más problemas. Otros países, como España e Italia, ya afectados gravemente por la desconfianza de los mercados, exigen una mayor implicación del fondo de rescate europeo. “Si se compran bonos de deuda griegos a los bancos, sabrán que son seguros y que se devolverán”, aseguró ayer un alto diplomático español, que reconoció que Alemania está todavía lejos de aceptar esa solución por la impopularidad de los rescates en su país.Pero la solución apremia. Ayer las primas de riesgo (la diferencia con el bono alemán a diez años) de España, Italia y Grecia volvieron a marcar nuevos máximos históricos ante la escasa confianza del mercado a una salida política a la crisis.

 La canciller quería un consenso precumbre que no se ha cerrado aún

La prima de riesgo española cerró en 337 puntos y el bono a diez años se paga ya a un 6,02% de rentabilidad. El riesgo de impago de Grecia está ya en 1.134 puntos sobre la solvencia de Alemania, e Italia, hasta hace poco alejada de estos problemas, cerró con una prima histórica de 306 puntos básicos.La sensación de riesgo de Italia no se suavizó ni lo más mínimo por la aprobación, por parte de la Cámara Baja, del plan de recortes propuesto por el Gobierno de Silvio Berlusconi y que plantea ajustar 79.000 millones de euros.

Esta complicada evolución de la renta fija estuvo aparejada por nuevos recortes en las bolsas. Tanto el índice de Milán como la Bolsa española cayeron más de un 1%, frente a moderadas alzas del resto de las plazas europeas. La sensación de que ya no quedan lugares seguros donde invertir llevó a un nuevo récord al oro, que ya está a un paso de los 1.600 dólares la onza. Las divisas, sin embargo, tuvieron una jornada inquietantemente tranquila, en la que sólo el franco suizo destacó como valor refugio.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias