El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, dijo hoy que sigue abierto al diálogo, aunque este concluyó el viernes, para resolver la crisis política causada por el golpe de Estado del 28 de junio contra Manuel Zelaya.

En una entrevista con la radio HRN de Tegucigalpa, Micheletti dijo estar permanentemente dispuesto al diálogo y reiteró que abandonará el cargo, si Zelaya también desiste de volver a la Presidencia.

"Estoy electo del 28 de junio al 27 de enero (de 2010, por designación del Parlamento), pero si la solución va por que yo me retire, aunque a muchos de mis amigos no les guste escuchar esto, yo sigo insistiendo: por la paz, la tranquilidad y la armonía, yo estoy dispuesto a cualquier cosa", expresó.

"Pero también yo exijo de otros sectores que tomen en consideración esta situación y que hagan lo mismo, que dejen de estar intentando boicotear las próximas elecciones generales" del 29 de noviembre, indicó.

"Estoy acá dispuesto a negociar, a transar, lo mejor para Honduras, no en lo particular", apuntó Micheletti, en sus primeras declaraciones públicas después de que el diálogo terminara el viernes, en las que destacó que su equipo no se ha levantado de la mesa.

Las comisiones de Micheletti y Zelaya no alcanzaron ningún acuerdo sobre la restitución de este último, punto que estancó el diálogo tras haber logrado consenso sobre el resto del Acuerdo de San José, propuesto por el presidente de Costa Rica, Óscar Arias.

La última propuesta, planteada el viernes por la delegación de Micheletti y rechazada el mismo día por Zelaya, planteaba que ambos se retiraran y dejaran paso a un nuevo mandatario y un Gobierno de transición.

El gobernante de facto ha planteado esa propuesta desde hace meses, pero Zelaya la ha rechazado.

Micheletti reiteró hoy que las elecciones de noviembre son la mejor salida de la crisis y rechazó los llamamientos a boicotearlas que hacen Zelaya, sectores políticos afines y el movimiento popular de resistencia que exige su restitución.

Boicotear los comicios "lo hemos escuchado desde la embajada del Brasil (donde Zelaya permanece desde el 21 de septiembre), lo hemos escuchado por ciertos sectores políticos del país, de aquellos que no tienen ni la mínima esperanza de salir electos por la voluntad popular, lo hemos escuchado de grupillos que se encargan de hablar y de escribir para decir este tipo de cosas", manifestó.

Pero "simple y sencillamente creemos que la democracia se sostiene con las próximas elecciones del 29 de noviembre, donde le suplico al pueblo hondureño que vaya masivamente a votar", indicó Micheletti.

La comunidad internacional ha amenazado con no reconocer los resultados de los comicios ni al Gobierno que surja de las mismas si no se restituye a Zelaya en el poder.