Michelle Obama tendrá las habilidades de una abogada societaria en la Casa Blanca si su marido gana las elecciones presidenciales en Estados Unidos, pero ella dice que su prioridad será ejercer el papel de "madre a cargo" de sus dos hijas.

El demócrata Barack Obama se enfrenta al republicano John McCain en las elecciones del martes. Si el senador por Ilinois gana en la primera vuelta, se convertirá en el primer presidente negro de los Estados Unidos y su mujer en la primera dama de color.

Michelle Obama, de 44 años, es una apasionada defensora de la candidatura de su marido, pero dice que no querría tener una función política en la Administración Obama.

"Mi primer objetivo, con toda honestidad, es continuar siendo una 'madre-jefe'", dijo en una entrevista reciente en una revista refiriéndose a sus hijas Malia, de 10 años, y Sasha, de 7.

También dice que espera concentrarse en la manera en que las mujeres mantienen el equilibrio familia-trabajo y las necesidades de las familias de militares. Podría actuar como asesora informal de su marido, como ha hecho durante la campaña.

Obama, que se crió en un barrio obrero en el sur de Chicago y fue a un colegio público, a menudo habla de su padre, quien trabajó para el sistema público de agua de la ciudad, y los valores que le inculcaron sus progenitores.

Después de ganar becas para las prestigiosas universidades de Princeton y Harvard en la facultad de derecho, Obama trabajó para un bufete de abogados y para la alcaldía de Chicago. Su trabajo más reciente fue como vicepresidenta de los hospitales de la Universidad de Chicago, donde ganaba más que su marido. Aunque los Obama son ahora adinerados, en parte debido a los derechos de autor de los dos libros de Barack Obama, Michelle Obama hace hincapié en los valores que aprendió mientras crecía.

"Cuando te has criado en una casa....(en la que) tienes amor, seguridad y gente que se sacrifica por tí (..) tienes la obligación de devolvérselo" dijo. "Por esta razón, el servicio comunitario ha sido una parte importante de mi vida", añadió.

"ORGULLOSA DE MI PAÍS"

ha aparecido en revistas como Vogue y Essence - contribuyen a crear una imagen juvenil del candidato.

En un discurso muy alabado en la Convención Nacional Demócrata, Michelle Obama compartió detalles de su vida en pareja y dijo que su marido representaba los típicos valores norteamericanos.

"Lo que me chocó cuando vi a Barack por primera vez fue que aunque tenía este nombre divertido y aunque él se ha criado al otro lado del continente, en Hawai, su familia era muy parecida a la mía", dijo.

"Lo criaron sus abuelos, que pertenecían a una clase trabajadora tradicional como mis padres, y por una mujer soltera que luchó por pagar las facturas tal y como hicimos nosotros".

Michelle Obama se ha alejado de la primera línea desde su discurso en la convención, aunque ella atrajo a mucho público mientras hacía campaña en favor de su marido.

En febrero, desató la controversia con comentarios sobre la campaña.

"Por primera vez en mi vida adulta, estoy realmente orgullosa de mi país", dijo a los asistentes en Wisconsin. "Y no precisamente porque Barack lo haya hecho bien, sino porque pienso que la gente está hambrienta de cambio".

Los conservadores la callificaron como poco patriótica y la polémica enfadó a algunos negros norteamericanos, quienes dijeron que ellos mantenían un alto nivel de patriotismo.

Desde entonces, Michelle Obama ha destinado tiempo a apoyar a las familias de los soldados norteamericanos que luchan en Irak y Afganistán. En un reciente discurso en Denver, recalcó que su marido estaba a poca distancia de la Casa Blanca.

"No habríamos llegado a este momento en la historia de nuestra nación sin ti porque algo milagroso ha ocurrido este año" dijo a la audiencia. "Esto es algo nuevo y muy importante. Por lo que yo estoy orgullosa de mi país y de mi marido".