Público
Público

Miles de peregrinos y fieles celebran la Navidad en la cuna del cristianismo

EFE

La comunidad cristiana de Tierra Santa y miles de peregrinos venidos de todo el mundo festejan hoy la Navidad, con Belén, Jerusalén y Nazaret como epicentros de los festejos y actos religiosos más importantes.

El Patriarca Latino de Jerusalén, monseñor Fuad Twual, ofició anoche la Misa del Gallo en la Iglesia franciscana de Santa Catalina de Belén, contigua a la Basílica de la Natividad, levantada sobre el lugar donde la tradición sitúa el nacimiento de Jesús.

En su homilía, el máximo representante de la Iglesia Católica en Tierra Santa hizo un llamamiento a la paz en Oriente Medio y afirmó que no habrá paz en la región hasta que israelíes y palestinos no se traten con respeto.

También exhortó a la reconciliación y a la esperanza para las familias venidas de todo el mundo: "Os podéis llevar con vosotros el deseo de paz y trabajar en favor de la paz... La paz en Tierra Santa, donde nació el príncipe de la paz. Y paz para todo el mundo, para hombres y mujeres de buena fe".

Twual concelebró la misa en seis idiomas diferentes, incluido el árabe, que es la lengua mayoritaria entre sus feligreses palestinos.

Como es tradición, asistieron al oficio religioso el presidente palestino, Mahmud Abás, además de destacados dignatarios locales y representantes de las potencias custodias de Tierra Santa.

Poco antes, varios coros amenizaron la fiesta con villancicos en la aledaña Plaza del Pesebre, donde también actuaron varias representantes de la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género, procedentes de España, sobre un escenario especialmente levantado para la ocasión.

El turismo a Belén ha repuntado en los últimos años, después de colapsar completamente tras el estallido de la Intifada de Al Aksa, en 2000. Sin embargo, los lugareños apuntan que no consiguen alcanzar los niveles deseados debido al muro israelí que rodea la urbe y a que los visitantes no suelen pernoctar en la ciudad cisjordana.

Peregrinos y miembros de las congregaciones locales acudieron hoy a los principales santuarios cristianos en la palestina Belén, en Jerusalén y en la israelí de Nazaret, donde se oficiaron misas de Navidad en medio de un ambiente festivo, que contrasta con la aparente normalidad de las poblaciones musulmanas y judías de la zona.

Uno de los puntos de interés es la Basílica de la Natividad, custodiada por la Iglesia Ortodoxa, que alberga una gruta que marca el lugar donde se cree estuvo el pesebre donde se alojó la sagrada familia al nacer Jesús.

Y en la de la Anunciación en Nazaret, el templo cristiano más grande de Oriente Medio, se venera un pozo de agua donde, según la creencia, la Virgen María recibió el anuncio del nacimiento de su divino hijo por el arcángel Gabriel.

La población cristiana de la ciudad que vio nacer a Jesús ha menguado de manera drástica en las últimas décadas, pasando de ser una mayoría del 90 por ciento el siglo pasado, a convertirse hoy en día en una minoría que no supera el 40 por ciento.

Con una colgante de oro rematado por un crucifijo, Miriam Azizeh, una palestina cristiana nacida en Belén asegura que pese a la difícil situación política que vive la región, su comunidad celebra la Navidad con regocijo.

"No podemos comprar muchas cosas y por fuera se aprecia la desazón, pero nuestro corazón está blanco en un día como hoy", afirma.

Jefa del departamento de Información en el Centro de la Paz en Belén, Azizeh aprovecha para hacer un llamamiento "a todo el mundo para que acuda a Belén, ya que depende principalmente del turismo".

Según diferentes estadísticas, la población cristiana en Tierra Santa ronda las 190.000 personas, de las que unas 40.000 residen en Cisjordania, 3.000 en la franja de Gaza, y los restantes en Jerusalén y el territorio israelí.

En su mayoría siguen los ritos de las iglesias orientales y ortodoxas, siendo los católicos una minoría.

Israel permitió a unos 400 palestinos de Gaza, territorio controlado por Hamás, viajar a Belén para asistir a los festejos navideños.

La jornada de Navidad en Israel se ha visto marcada por el conflicto con los palestinos, pues hoy ha sido enterrado un colono judío tiroteado ayer en una carretera de Cisjordania por milicianos vinculados al brazo armado de Al Fatah.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias