Tras 35 años en el mundo del espectáculo, John Travolta hará su debut en la animación poniéndole voz a un cachorro adorable en la película de Walt Disney "Bolt".

La película, que se estrenó en las salas estadounidenses la semana pasada, supone un salto para el actor después de una carrera cinematográfica que empezó con los musicales "Grease" o "Fiebre del sábado noche" y sorprendió con "Pulp Fiction" y "Campo de batalla: La Tierra".

Travolta, de 54 años, explicó a Reuters cómo su carrera ha ido cambiando a lo largo de los años, cómo cometió algunos errores y cómo escoge sus nuevos proyectos.

P: "Bolt" es su primera película de dibujos animados, ¿Qué le ha parecido?

R: Fue misterioso. Es lo contrario al protocolo de una película normal. La haces fuera de contexto. Estás realmente a merced del director, te guía completamente. En una película de acción, sé el tipo de toma que quiere el director antes que él. En esto los animadores saben qué tipo de toma quieren pero yo lo descubro 30 tomas más tarde.

P: La canción, con Miley Cyrus, para el tema de "Bolt" es el primer tema que ha hecho en 20 años. ¿Por qué no le escuchamos cantar más a menudo?

R: Dado el éxito que he tenido en las películas, no me he atrevido a aventurarme en la música en mucho tiempo. Siento como si invitara a la música a entrar en mi vida, no como si lo solicitase. Me gusta condimentar mi carrera con música buena en lugar de entrar en un mundo tan competitivo y perseguir el éxito puntual con una canción entre mil. Tengo la suerte de poder hacer eso porque el cine es mi primera apuesta.

P: Pero empezó en el teatro musical. ¿No lo echa de menos?

R: Prefiero musicales de cine como "Grease" o "Hairspray". En los 16 años que hice teatro disfruté los primeros ocho, pero no los demás. Se volvió problemático cuando empecé a no querer hacer la misma actuación una y otra vez, ocho veces por semana. Lo que buscas es tener algo duradero, y cuando lo encuentras te das cuenta de que es eso exactamente lo que te hace no querer hacer teatro nunca más.

P: Tiene en camino cuatro películas para 2009. ¿Qué es más importante para usted, la calidad o la cantidad?

R: No puedes controlar la calidad de los proyectos que te llegan, así que si te llegan unos cuantos a la vez que te convencen, los coges. El dinero lo tengo, ahora sólo tengo que hacer trabajo bueno. Pones tantas manzanas buenas en la cesta como puedes y esperas lo mejor y que la cesta no se caiga. Me ofrecieron varias películas grandes pero no podía hacer nada con ellas y dije que no. Y me enorgullezco.

P: ¿Qué guiones le ha dado más pena rechazar?

R: "Chicago", probablemente (le ofrecieron el papel de Billy Flynn). No me vi en el papel. Había muchas mujeres que odiaban a los hombres y a mí me gustan las mujeres a las que les gustan los hombres. (Ríe) Probablemente tenía que haber cogido "La Milla Verde" y "Oficial y Caballero", pero ¡les di a Richard Gere y a Tom Hanks una carrera! Lo que uno rechaza puede ser de gran ayuda para otros".