El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha advertido hoy de que no "consentirá" que los catalanes paguen más que otras comunidades y reciban menos, y ha rechazado que Cataluña juegue "de farol" en la negociación para fijar la nueva financiación autonómica.

Montilla también ha reconocido, en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Efe, que el vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, le decepcionó "un poco" en su intervención en el Congreso a finales de agosto, donde declaró que "la ausencia de un acuerdo" sobre la reforma del modelo de financiación no puede ser considerado "un incumplimiento" por parte del Ejecutivo.

El presidente catalán ha explicado que el actual modelo de financiación es "muy injusto" y que "quienes lo están padeciendo y lo padecerán" en mayor grado son los gobiernos que gestionan la mayoría de las políticas sociales, como es el caso de Cataluña, responsable de prestaciones como la sanidad o la educación.

"Si queremos que la crisis no afecte o afecte lo menos posible a los sectores menos favorecidos de la sociedad, eso quiere decir que no podemos bajar el esfuerzo que hemos hecho por mejorar esas políticas, y eso requiere recursos", ha señalado Montilla.

El presidente catalán ha asegurado que los ciudadanos de Cataluña pagan más que la media del resto de España y, en cambio, reciben menos que otros territorios.

"¿Qué solidaridad es esa? Aquí hay muchas más personas que pagan más de la media y que no pueden recibir, porque no es justificable, menos que la media. Eso no lo vamos a consentir", ha subrayado Montilla, que ha vuelto a rechazar fijar una cifra que concrete cuánto dinero debería obtener de más la comunidad con el nuevo modelo de financiación.

Ha expresado, en este sentido, que si Cataluña fijara una cifra muy alta, "como quien juega de farol", correría el riesgo de que el resultado final difiriera mucho de ese objetivo, con lo cual "se crearía frustración".

Por contra, si se fijara una cifra realista, el Gobierno empezaría a negociar partiendo de esa cuantía a la baja, ha añadido Montilla, que apuesta por llevar la financiación "con sentido común", aunque no sea fácil.