El ex presidente de Ecuador León Febres Cordero murió el lunes de un enfisema y cáncer de pulmón a los 77 años, según confirmaron correligionarios del polémico líder político a medios locales.

Febres Cordero, ingeniero mecánico que lideró durante años al otrora poderoso Partido Social Cristiano (PSC), gobernó el país entre 1984 y 1988 con mano dura, con la que logró imponerse en sectores públicos clave y combatir a un grupo guerrillero que emergió en el país.

Conocido como "el dueño del país" por su influencia en los tribunales de justicia y por su forma de gobernar, Febres Cordero ocupó varios cargos públicos desde los que combatió a sus rivales políticos e impuso sus tesis conservadoras.

La lucha contra el terrorismo se convirtió en la política del régimen, lo que dio paso a atropellos de los derechos humanos, según varias organizaciones.

El Gobierno decretó tres días de duelo nacional por el fallecimiento del ex mandatario.

Amado por sus correligionarios, quienes lo llamaban el Presidente, y odiado por sus adversarios políticos, el ex mandatario logró llegar a la presidencia del país gracias a sus ofrecimientos de "pan, techo y empleo", un lema que caló entre los sectores pobres del país.

"El presidente León Febres Cordero ha dejado la vida terrena para inmortalizarse como uno de los líderes de la historia del país", dijo su amigo personal Alfonso Harb, a periodistas.

Paulatinamente, fue desvinculándose de la política del país por sus múltiples dolencias, hasta retirarse definitivamente de la política cuando el presidente Rafael Correa asumió la presidencia del país en 2007.

Febres Cordero viajaba constantemente a Estados Unidos para sus tratamientos médicos.

Correa, un popular líder de izquierda, lo calificó como uno de sus principales adversarios políticos.