La novela negra como resorte del debate político, la fantasía como género para adultos y la relación entre literatura e Historia son los tres ejes de la 22 edición de la Semana Negra de Gijón, que arranca este viernes, explicó en Madrid su director, Paco Ignacio Taibo II.

Más de 120 autores, de los que alrededor de una veintena son latinoamericanos, tienen previsto participar en ese evento literario, que es, en palabras de su director, "una gran fiesta popular con una columna vertebral muy fuerte que es la literatura".

"Logramos combinar la gran fiesta con la gran literatura. Se mezclan muy bien, se contaminan una a la otra", añadió el escritor hispano-mexicano, que participó hoy en un debate sobre literatura de género en la Casa de América de Madrid junto a otros autores que asistirán a la Semana Negra de Gijón.

Durante ese festival literario, que se desarrollará desde mañana hasta el próximo 19 de julio, "se van a romper muchas lanzas sobre la novela histórica light, que en el mercado español está haciendo estragos y que es literatura chatarra".

También "habrá cargas de caballería contra la novela nórdica", añadió Taibo II, que confesó que "el fenómeno Larsson" le es "absolutamente ajeno", ya que aún no ha leído ninguna de las novelas de la trilogía Millenium.

"Voy a llegar a México en agosto, leeré una y si me gustan leeré las otras dos", dijo el autor, que aseguró que "cuando sale un bestseller", espera "seis meses antes de leerlo por un problema de salud mental".

Otro asunto que se debatirá en la Semana Negra es el cómic como instrumento no sólo de literatura narrativa, sino de reportaje, a través del recientemente publicado sobre los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid.

El autor hispano-mexicano también destacó el homenaje a su padre, el escritor y periodista recientemente fallecido Paco Ignacio Taibo I, en el que participarán los cantantes Víctor Manuel, Ana Belén y Joan Manuel Serrat.

La Semana Negra de Gijón reúne cada año a más de un centenar de escritores, editores y críticos europeos, iberoamericanos y estadounidenses del género policiaco.

Las tertulias, presentaciones de libros y mesas redondas se alternan este año con conciertos, como los de Josele Santiago o Raimundo Amador, cine, recitales de poesía, exposiciones, atracciones de feria y un encuentro de fotoperiodismo.

Durante la Semana Negra se conceden cinco galardones con los que que se destacan las mejores novelas del pasado año escritas en español, en géneros como el policíaco o el histórico.

El colombiano William Ospina es uno de los finalistas al Premio Espartaco a la mejor novela histórica de 2008 por "El país de la canela", mientras que por el Premio Hammett a la mejor novela policiaca compiten el argentino Raúl Argemí por "La última caravana" y el nicaragüense Sergio Ramírez, por "El cielo llora por mí", entre otros.