La presencia de mujeres en las cárceles españolas, que representan algo menos del nueve por ciento de la población reclusa, se ha triplicado desde la década de los ochenta, lo que sitúa a los centros penitenciarios de España entre los que más internas albergan dentro de los países de la Unión Europea (UE).

Así se ha puesto de manifiesto durante la celebración del I Congreso Internacional de Acción Socioeducativa en el Medio Penitenciario, en el que además se ha dado a conocer que las reclusas cumplen condena en su mayoría por delitos de tráfico de drogas y suelen estar más tiempo de media en prisión que los hombres.

La directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha manifestado a los periodistas que la situación minoritaria de las mujeres lleva también aparejados "problemas no muy visibles por el sistema" como su incorporación a actividades dentro de las cárceles.

Gallizo ha avanzado además la intención del Gobierno de "sacar a las madres y a los niños de los centros penitenciarios", para lo que ya se han llevado a cabo "algunos cambios normativos, así como la construcción de nuevas infraestructuras especiales como la que en breve estará en marcha en Mallorca".

"Pretendemos crear -ha asegurado- una convivencia de familia normalizada y conseguir que el desarrollo del niño en sus primeros años sea sin el estigma de la privación de libertad".

Por otra parte, la responsable de Instituciones Penitenciarias ha lamentado la "sobreocupación" de las cárceles, que ha motivado "el esfuerzo de la Administración por impulsar varias reformas legales que alivien esta situación".

Entre las iniciativas, el Ministerio del Interior prevé la puesta en marcha de manera inmediata de tres nuevos centros penitenciarios y ya ha proyectado otras once prisiones más por toda la geografía española.

Granada será una de las ciudades donde se abra un nuevo centro de reinserción a principios del año próximo con una capacidad de unas 300 plazas "que servirán para descongestionar la actual cárcel provincial de Albolote, de la que dependen unos 1.900 reclusos".

Así lo ha explicado el director de este centro penitenciario, Naúm Álvarez, quien ha revelado que para aliviar "la presión numérica", unos 60 internos han sido trasladados al centro Sevilla 2 de Morón de la Frontera.

Álvarez ha informado de que son unas 170 las mujeres encarceladas en el penal de Albolote -una veintena de ellas embarazadas-, y unos veinte los niños que viven en las dependencias de la prisión.

El director de la prisión de Albolote ha indicado además que uno de los objetivos es que los niños accedan a una amplia oferta educativa y cultural, "instrumentos valiosos para que no les marque negativamente su estancia en la cárcel".