El gallego Omar González, técnico de su paisano Javier Gómez Noya, que ayer se proclamó campeón de Europa de triatlón -por segunda vez en su carrera- en la localidad holandesa de Holten, declaró a EFE que este nuevo título "quita presión".

Después de haberlo conseguido en Copenhague, en 2007, Gómez Noya -campeón mundial el año pasado, ganador de las últimas tres ediciones de la Copa del Mundo y primero del ránking mundial las pasadas tres temporadas- repitió oro europeo ayer, relegando a la segunda plaza a la gran revelación del año, el británico Alistair Brownlee.

"Fue un mano a mano entre los dos hasta que Javi impuso su ley. Brownlee le atacó primero y Javi le aguantó; luego atacó Javi y fue Brownlee el que resistió, pero en la tercera vuelta (de las cuatro que se dieron al circuito a pie) lo volvió a intentar y casi lo deja seco", explicó en conversación telefónica con Efe desde tierras holandesas, antes de partir hacia Kitzbuehel (Austria), próxima estación de las series mundiales.

González sustituyó, al principio de la pretemporada, a otro gallego, José Angel Rioseco, técnico a cuyas órdenes logró, hasta final del 2008, todos sus grandes éxitos deportivos Gómez Noya, que en los Juegos de Pekín se tuvo que conformar con un cuarto puesto que le supo a poco cuando partía como el gran favorito al oro olímpico.

"Los resultados estaban siendo buenos", explicó Omar González, en referencia a los podios del Mundial logrados en Madrid -donde fue tercero- y Washington D.C. -segundo-. "Pero hacía falta ganar. Y este era el mejor momento", apuntó.

"El europeo es un título importante. Y un título siempre te quita presión para seguir trabajando fuerte y con ganas el resto de la temporada", comentó Omar González.