La ministra del Interior de Reino Unido se vio obligada el domingo a pedir disculpas por utilizar dinero público para pagar películas pornográficas, una situación embarazosa para el primer ministro Gordon Brown, que se prepara para acoger la cumbre del G20.

En la última trifulca política por los gastos de legisladores y autoridades, la ministra del Interior Jacqui Smith, que ya es objeto de investigación por una ayuda para vivienda, dijo que había pasado por error el gasto de la televisión de pago por visionado cuando presentó la factura de su conexión a Internet.

Smith no dimitirá y se centrará en la protección de los líderes del G20 que se reúnen en Londres esta semana para abordar la crisis financiera, dijo una fuente cercana a la ministra.

Las películas para adultos, que cuestan cinco libras cada una, las vio su marido, Richard Timney, mientras ella estaba ausente del hogar familiar en Worcester, centro de Inglaterra, el pasado abril.

"Eran películas para adultos, eso es todo lo que necesitan saber. Mucha gente puede utilizar su imaginación en eso", dijo la fuente a Reuters. "Decir si ella está molesta con su marido no viene al caso".

Un organismo de ética del Gobierno dijo el pasado lunes que iba a revisar las ayudas económicas a los miembros del Parlamento después de una serie de denuncias que han causado malestar en la opinión pública.

El portavoz de Brown ofreció apoyo a Smith, diciendo en un comunicado que la ministra había "hecho lo correcto" al devolver el dinero tan pronto como se dio cuenta de lo ocurrido.