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Pan con queso y un racimo de uvas

Un paseo gastronómico-cultural por las rutas del vino y de la sierra de Cádiz nos descubre el siempre fascinante interior de la provincia gaditana.

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Si a la sierra de Cádiz, con su inevitable Ruta de los Pueblos Blancos y el Parque Natural de Grazalema le añadimos el atractivo cultural de la Ruta del Vino Jerez-Xeres-Sherry, la propuesta para conocer el interior de la provincia de Cádiz, uno de sus tesoros mejor guardados, resulta irresistiblemente tentadora.

Aunque pueblos blancos hay en toda Andalucía, parece que se han quedado con ése nombre los pueblos de la sierra de Cádiz. No sólo son blancos, sino que además están bien conservados, y han sabido guardar el sabor inconfundible de la arquitectura popular.

En la sierra de Grazalema destaca la villa del mismo nombre, aunque también merecen una visita todos los demás. Zahara de la Sierra, uno de los pueblos más bellos de Andalucía, está colgado de la montaña, y Benamahoma, y Villaluenga y Benaocaz se nos aparecen como manchas luminosas sobre las verdes montañas. Ubrique es el más grande. Está hundido en un valle, y sin resultar tan pintoresco como los otros, ofrece al visitante el atractivo de su potente industria marroquinera.

La más bella de las sierras de Cádiz, ésta de Grazalema, además de ser el lugar donde más llueve de España, acoge una de las mayores rarezas botánicas de Europa: el pinsapo, un abeto de extraordinaria belleza. La masa de pinsapar ocupa unas tres mil hectáreas de las 52.000 de este parque natural, en cuyas crestas vive una de las mayores colonias de buitres leonados de Europa. A los pies de la sierra y el pinsapar se encuentra la Garganta Verde, un tajo vertical en cuyas paredes calizas se esconden estalactitas y estalagmitas, además de inesperadas cascadas de gran belleza.

UVAS...
Pero el interior de la provincia de Cádiz ofrece otros atractivos que pueden ser disfrutados en cualquier época del año. La Ruta del Vino de la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry, que discurren, entre otras poblaciones, por Sanlúcar de Barrameda, El Puerto de Santa María y Jerez de la Frontera, concentra los iconos más clásicos de la provincia: historia, cultura, caballos, vino, flamenco, gastronomía...

Las bodegas aquí son algo más que simples bodegas, porque están llenas de historia, se engastan en un paisaje y se incardinan en una sociedad que ha tenido y tiene a los viñedos y al vino como eje de su existencia. Recorrer alguna de ellas es como contemplar una catedral en silencio.

Las bodegas del marco de Jerez ofrecen una gran variedad de propuestas: visitas enoturísticas y degustaciones, almuerzos de maridaje, paseos por las viñas, visitas nocturnas, desayunos típicos, catas no sólo de vinos, sino de vinagres y brandys, espectáculos ecuestres, de flamenco, etc... La última de las propuestas en sumarse y quizá una de las más singulares es Tai Chi entre viñedos que propone practicar este deporte en un viñedo mientras se pone el sol.

La bodega Compañía General de Vinos de Cádiz en Arcos de la Frontera recupera los antiguos vinos de Regantío Viejo y está creando nuevas propuestas como Fine Tempo. En la finca Regantío se puede disfrutar de los vinos los fines de semana en una oferta que propone maridarlos con un buen plato de chorizo y lomo en manteca, huevos fritos ecológicos y una buena fritá de papas. Sólo para almuerzos y hay que llamar para reservar.

...PAN Y QUESO
La hablar de quesos gaditanos es referencia obligada el Queso Payoyo. Con este nombre se conoce a este queso artesanal que se produce en el pueblo de Villaluenga del Rosario. Proviene de un tipo de cabra autóctona de la Sierra de Cádiz, la cabra payoya, de cuya leche se obtiene un queso totalmente ecológico y delicioso.

Pero además están los quesos de El Bosque, como El Bosqueño, los quesos artesanales Pajarete de Villamartín, quesos ecológicos El Gazul de Alcalá de los Gazules, o los quesos La Cabra Verde de Arcos de la Frontera. Todos ellos premiados en distintos certámenes nacionales e internacionales con diversas distinciones.

La ruta permite también que el visitante tenga un papel activo. De esta manera se puede participar en el proceso de elaboración del queso en el taller de la Finca Las Hazuelas, situado en Grazalema. También se puede asistir a una cata de quesos dirigida por un monitor.

También la Sierra de Cádiz elabora su propio aceite de oliva virgen de gran calidad y de baja acidez y con Denominación de Origen 'Sierra de Cádiz'. Documentos históricos, que datan del siglo XVIII, hablan ya de la calidad y exquisito sabor de los aceites de las localidades de Olvera, Algodonales, Alcalá del Valle, Zahara de la Sierra, Setenil ...

En la almazara Oleum Viride de Zahara de la Sierra se puede visitar el molino para ver la elaboración de este excelente aceite serrano y degustar los diferentes tipos con un buen pan de campo.


Patronato Provincial de Turismo de Cádiz
Rutas del Vino y la Sierra de Cádiz

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