El mercado de banca privada mantuvo el pasado año en España un "notable dinamismo" y el volumen de patrimonio gestionado alcanzó a cierre de 2007 los 283.700 millones de euros, un 21 por ciento más que el año antes, si bien se espera que en el presente ejercicio este crecimiento sea menor.

Según un estudio de la consultora DBK, las entidades de banca privada se enfrentan a un contexto de creciente competencia, motivado por la desaceleración del crecimiento de la economía, la volatilidad de los mercados bursátiles y el cambio de ciclo en el mercado inmobiliario.

No obstante, existe "un amplio mercado potencial" de clientes con altos patrimonios que "todavía no es atendido" por los servicios especializados que ofrece la banca privada, por lo que a corto plazo se espera un mantenimiento de la tendencia al alza del negocio.

El número de clientes activos alcanzó a cierre de 2007 los 288.500, con un patrimonio medio de 983.000 euros.

El crecimiento registrado el pasado año fue inferior al contabilizado en el bienio 2005-2006 (con incrementos del 28 por ciento anual), debido a la menor revalorización de las carteras, la inestabilidad de las bolsas durante la segunda mitad del año y la pérdida de fortaleza de la actividad económica, destaca DBK.

Las entidades de banca universal concentraban a cierre de 2007 el 55,3 por ciento del patrimonio de particulares gestionado en banca privada, unos 156.900 millones de euros, seguidas de las entidades de banca especializada, con una cuota del 36,6 por ciento, mientras el 8,1 por ciento restante correspondió a entidades no bancarias.

En España, las cinco primeras entidades del mercado -Banco Santander, Banif Banca Privada, Bankinter, Banco Sabadell y La Caixa- reunieron en 2007 una cuota conjunta sobre el patrimonio total gestionado del 49 por ciento, destaca la consultora.

En el mercado de banca personal, en 2007 se identificaban cerca de dos millones de clientes en unidades especializadas, que en conjunto sumaban un volumen de patrimonio de 266.000 millones.

Las previsiones de evolución del mercado de banca privada a corto y medio plazo apuntan a la obtención de crecimientos inferiores a años anteriores, como consecuencia de la depreciación de las carteras invertidas, en un marco de desaceleración económica y menores rentabilidades obtenidas en los mercados financieros.

Se espera que 2008 se cierre con un crecimiento del 10 por ciento en el volumen de patrimonio gestionado en banca privada.

El negocio de banca personal avanzará en su desarrollo, a nivel de servicio y en mejora en la captación de clientes potenciales por parte de las redes comerciales de bancos y cajas de ahorros.