El Gobierno chino ha presentado una protesta ante Washington por el encuentro mantenido por la subsecretaria de Estado de EEUU para Asuntos Globales, Paula J. Dobriansky, con el Dalai Lama, en un nuevo intento por bloquear diplomáticamente al líder espiritual tibetano.

"La subsecretaria insistió en reunirse con el Dalai Lama sin tener en cuenta la firme oposición de China y realizó comentarios irresponsables sobre asuntos tibetanos, lo que es por completo un asunto interno de China", señaló en rueda de prensa la portavoz de turno del Ministerio Chino de Asuntos Exteriores, Jiang Yu.

Jiang añadió que la decisión de EEUU ha "violado de forma extrema los principios básicos de las relaciones internacionales" y que China ha presentado una protesta formal ante Washington.

La portavoz insistió en la versión del gobierno autoritario chino que culpa a "la camarilla del Dalai Lama" de instigar la revuelta registrada el mes pasado en el Tíbet, una región que tuvo periodos de autonomía y que fue ocupada por la China comunista en 1951.

En la protesta murieron, según el Gobierno, una veintena de civiles a manos de tibetanos, mientras que los grupos en el exilio sostienen que fueron 140 las víctimas mortales por la represión china.

Ambos extremos no han sido contrastados, ya que Pekín mantiene cerrado el acceso a la región autónoma a los extranjeros.

"No se puede conceder ninguna exculpación a un hecho irrefutable. La subsecretaria no condenó los crímenes de los alborotadores, pero los absolvió de su responsabilidad y su blanco es el Gobierno y el pueblo chinos. ¿Qué espera conseguir?", añadió la portavoz.

Jiang pidió a Washington que deje de apoyar "las actividades secesionistas de la camarilla del Dalai Lama para evitar dañar las relaciones chino-estadounidenses y la imagen de América".

Dobriansky se reunió ayer, lunes, con el Dalai Lama en Michigan (EEUU) y publicó una nota editorial en el diario "Washington Post" criticando la política china en el Tíbet.