La polémica por el sistema de puntos para el campeonato de Fórmula Uno de esta temporada es una vergüenza, ha dicho el jefe de Ferrari Stefano Domenicali.

La Federación Internacional Automovilística (FIA) dijo la semana pasada que el piloto que ganase más carreras se llevara el título este año pero después pareció recular tras la presión de la Asociación de Equipos de Fórmula Uno (FOTA, en sus siglas inglesas).

La FOTA quería que el ganador de un gran premio reciba 12 puntos en lugar de 10 y ahora parece que el sistema de puntos del año pasado seguirá en vigor.

"Me parece una vergüenza lo que ha pasado en los últimos días", dijo Domenicali a la Gazzetta dello Sport del lunes.

"Queríamos una mayor diferencia entre el ganador y los otros, en lugar de que se quede todo como en 2008. Tenemos que tener paciencia".

Una controversia sobre los difusores también está empañando los prolegómenos del comienzo del campeonato este domingo en Australia.

El presidente de la FIA Max Mosley espera que los equipos protesten los difusores traseros en Brawn GP, Toyota y Williams.

"Estamos convencidos de que ciertas interpretaciones que se han aplicado no se corresponden con la naturaleza de las normas", dijo Domenicali.

"Se necesita una gran sentido de la responsabilidad por parte de todo el mundo. Espero que este tema se pueda resolver pronto".

Felipe Massa de Ferrari, que se quedó a un punto del campeón del año pasado, Lewis Hamilton, es el favorito de esta temporada pero Domenicali cree que el campeón de 2007 Kimi Raikkonen puede ser el protagonista de nuevo.

"Le veo motivado y más delgado, tres kilos me han dicho. Él sabe que, tanto como piloto de Ferrari y como hombre, será una temporada importante. Es lo suficientemente inteligente como para entenderlo", dijo Domenicali.

El jefe de Ferrari añadió que el equipo utilizará casi con seguridad el nuevo KERS (sistema de recuperación de energía cinética) en todas las carreras esta temporada y apostó por el antiguo jefe de Ferrari Jean Todt como el sucesor de Mosley en la FIA.

También dijo que no esperaba muchos más adelantamientos a pesar de las nuevas reglas y dijo que temía que pudiera haber más accidentes a causa de los alerones frontales más anchos.