El portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha anunciado que su grupo votará esta tarde en contra de todas las peticiones de comparecencia del Gobierno que ha hecho la oposición porque ya hay compromiso del Ejecutivo de que acudan seis ministros en septiembre, cuando se reanude el periodo de sesiones. En declaraciones a los periodistas en el Congreso, Alonso ha subrayado el compromiso del Ejecutivo con la Cámara Baja y ha asegurado que este verano, en contra de lo que denuncia la oposición, ha habido 'mucha actividad parlamentaria'.

Alonso ha adelantado que su grupo va a rechazar todas las peticiones de comparecencia que ha hecho la oposición -31 solicitudes para once ministros- porque de aprobarse alguna tendrían que venir a la Cámara esta misma semana, y según él, es mejor esperar a septiembre, cuando se reanuda el periodo de sesiones.

A las cinco comparecencias que ayer anunció el Gobierno, de los ministros de Economía y Empleo en pleno y de los titulares de Fomento, Asuntos Exteriores y Agricultura, Alonso ha sumado la del titular de Industria, José Manuel Soria, que también acudirá a petición propia a la comisión correspondiente de la Cámara Baja.

La oposición no se ha sentido satisfecha por este nuevo anuncio del portavoz conservador. Así, la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez,  ha avisado a Rajoy de que en este momento es cuando el país más necesita un Gobierno que 'dé la cara'. En rueda de prensa, Rodríguez ha arremetido duramente contra el PP por su negativa a aprobar ninguna de las 31 peticiones de comparecencia.

A su juicio, esa actitud sólo contribuye a 'destruir los cimientos de la legitimidad y de la credibilidad' del país, precisamente cuando 'nunca como ahora España necesita un Gobierno que dé la cara'. 'La credibilidad y la confianza se gana dando la cara', ha apostillado. Según su criterio, el Ejecutivo se escuda en 'la estrategia de Mariano Rajoy', que consiste -a su entender- en actuar en el Gobierno 'con la misma frivolidad' que cuando estaba en la oposición, rehuir los debates parlamentarios y ampararse en la herencia recibida.

El grupo de la Izquierda Plural -que aglutina a IU, ICV y Cha- ha ido más allá, y ha decidido abandonar la Diputación Permanente para no ser 'cómplices' de 'una farsa' y no ha defendido ninguna de sus peticiones ni las votará en protesta por el anuncio del PP.