Manolo Preciado, entrenador del Sporting de Gijón, admitió que debió hacer "de otra forma" sus declaraciones del pasado viernes, en las que llamó "canalla" a José Mourinho, técnico del Real Madrid, pero afirmó que no se arrepiente "del fondo" de lo que dijo "porque hay momentos en que las cosas no se pueden callar".

"Fue una lástima no haber podido sumar en este partido, pero el Real Madrid tiene muchos argumentos para ganar", dijo Preciado, y destacó "la actitud y el trabajo" de todo su equipo, "que hizo que el Madrid se tuviera que emplear a fondo para ganar".

"No será fácil ganar en El Molinón", recalcó Preciado, quien indicó que "a pesar de la diferencia de presupuesto entre el Real Madrid y el Sporting, esto no deja de ser fútbol e influyen muchas cosas, como la actitud y el trabajo, y a un partido este equipo puede ganar a cualquiera".

Tras asegurar que, por ese motivo, "los equipos pequeños tienen algo que decir en esta liga", dijo que confía en que el suyo se empleé con la misma intensidad "en los partidos que quedan de la primera vuelta", que son contra los equipos de 'su' Liga.

El técnico sportinguista no quiso opinar sobre la actuación del árbitro, a pesar de que sus jugadores aseguraron que Benzemá hizo falta en su remate previo al gol de Higuaín, e indicó que el colegiado "tuvo un partido muy complicado".

José Mourinho, que tuvo que ver el partido desde la grada porque está sancionado, no compareció en la sala de prensa del estadio El Molinón al finalizar el partido. En su lugar, lo hizo su ayudante Aitor Karanka.

El ex jugador del Real Madrid fue parco en palabras y se limitó a decir que en el primer tiempo su equipo se "contagió del barullo que hubo en el campo y en la grada".

"Pero eso se habló en el vestuario en el descanso y en la segunda parte se reaccionó", resaltó.

"El Sporting jugó como esperábamos, con mucha intensidad y arropado por un público muy motivado", señaló Karanka, y reconció que el equipo gijonés les hizo "dar el callo".