Público
Público

Problemas mentales de hijos de soldados EEUU, ligados a guerras

Reuters

Por Alina Selyukh

Cuanto más tiempo pasarondesplegados en Irak o Afganistán los soldados estadounidenses,más propensos son sus hijos a haber sido diagnosticados conproblemas de salud mental, según reveló un estudio.

La investigación, publicada en Archives of Pediatrics andAdolescent Medicine, analizó registros médicos de 307.520 hijosde entre 5 y 17 años de personal activo del Ejército. Losautores hallaron que casi el 17 por ciento de ellos exhibía untrastorno de salud mental.

"Los niños de padres que pasaron más tiempo desplegadosentre el 2003 y el 2006 estaban peor que aquellos cuyos papáshabían estado en el campo de batalla por un lapso más corto",escribieron los investigadores.

La directora del estudio fue Alyssa Mansfield, quetrabajaba en la University of North Carolina en Chapel Hill enel momento en que realizó la investigación.

El Ejercito estadounidense reportó unos 562.000 miembros enactividad en el 2010, con más de 570.000 hijos. Algo menos dedos tercios de todos los hombres y mujeres en actividad estabancasados y el 15 por ciento estaba criando a sus hijos comoúnico padre.

Los hijos de quienes estuvieron desplegados al menos unavez, durante un promedio de 11 meses, como parte de lasoperaciones de Estados Unidos en Irak y Afganistán eranespecialmente proclives a padecer trastornos de conducta,depresivos o relacionados con el estrés, comparado con losniños de padres que nunca habían ido a la guerra.

Los varones eran más propensos que las niñas a sufrirproblemas de salud mental, según el reporte, que revisóregistros de pacientes tratados en instalaciones médicasmilitares y centros civiles a través de coberturas militares.

"Solíamos pensar el despliegue (de soldados) como unaexperiencia personal: voy, estoy lejos, es difícil y luegoregreso. Pero en la vida militar los despliegues se suceden ylas familias tienen que lidiar con sus consecuencias", dijo eldoctor Stephen Cozza, profesor de psiquiatría de la UniformedServices University of the Health Sciences.

Cozza estudió el tema y escribió un editorial que acompañael reporte.

"Se trata de consecuencias que no necesariamente son acorto plazo", añadió. Los desafíos no siempre terminan con elregreso al hogar, expresó el científico, dado que los soldadospueden traer sus propios problemas de salud mental, que afectanlas relaciones con sus hijos.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias