Predicador por la mañana, hombre invisible por la tarde.

A primera hora, el debate por el veto del Senado a los Presupuestos de 2009 llevaba al líder delPP, Mariano Rajoy, a sacar su artillería pesada contra el presidente del Gobierno. A tenor de sus intervenciones, parecía que el futuro económico de España dependía de la anulación de las cuentas del Estado para el año que viene.

Sin embargo, en el momento crucial, el de la votación, Rajoy ha hecho mutis por el foro dejando su escaño vacío y su voto, sin dueño, flotando por el Congreso de los Diputados.

A la hora de las votaciones, en el hemiciclo faltaban ocho diputados: siete del PP y el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida.

El escaño de Rajoy ha permanecido vacío mientras los 342 presentes se pronunciaban sobre las iniciativas legislativas sometidas a consideración de la Cámara en el último pleno del año.

Finalmente, el veto del Senado a los presupuestos ha sido levantado por 178 votos a favor del proyecto de cuentas públicas. De ellos, 169 son del grupo socialista, seis del PNV, dos del BNG y uno del PP, ya que por error el diputado por Badajoz Mariano Gallego ha apoyado las cuentas del Gobierno.

Los 163 votos en contra procedían del grupo popular y de los diputados de CiU, ERC, IU, ICV, Coalición Canaria, NaBai y UPyD; el diputado de UPN Carlos Salvador se ha abstenido.

Fuentes de la dirección del Partido Popular han justificado a la ausencia de Rajoy en la votación porque lo que hoy se decidía en el Congreso no era la aprobación definitiva de las cuentas públicas, sino levantar el veto establecido por el Senado, y para eso bastaba el respaldo de 176 diputados.