Un paréntesis en las largas vacaciones parlamentarias para hablar del Consejo Europeo de la UE celebrado en Bruselas hace ya más de un mes y del que casi nadie se acuerda, entre ellos la inmensa mayoría de sus señorías. El presidente Rajoy ha refrescado la memoria colectiva. A su estilo, esto es aburriendo al personal y, como es habitual en él, sin adelantar acontecimiento alguno. A estas alturas de la legislatura ya es muy difícil esperar un cambio de actitud.

En consecuencia, lo más sustancial de su primera intervención para glosar los contenidos del último Consejo Europeo ha sido más de lo mismo, como ya es habitual en su discurso desde hace meses: sacar pecho por las exiguas cifras macroeconómicas que apuntan la salida de la recesión dela economía española. 'Creo que podemos decir que lo peor ya ha pasadoy que hemos empezado a transitar por la senda de la recuperación', ha sentenciado al final de su parlamento, de apenas 25 minutos.

 Eso sí, se ha visto obligado a rendirse a la evidencia en su apretado resumen de mitad de legislatura, aunque lo ha querido vincular con surelación con la Unión Europea y su presencia en las cumbres de Bruselas.Ha afirmado que 'las cifras de desempleo en Europa y en particular en algunos Estados, como España, siguen siendo inaceptablemente elevadas'. Lo ha dicho tras 'resaltar' la contribución española a la creación de la Iniciativa de Empleo Juvenil, un plan europeo para fomentar el empleo entre jóvenes entre 15 y 24 años con una dotación de 6.000 millones de euros.

Rajoy: “Las cifras de desempleo en Europa y en particular en España, siguen siendo inaceptablemente elevadas”.

Pero ha sido precisamente en ese punto sobre el que el líder de laoposición, el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, ha vertido su mayor crítica. '¿Le parece normal que España haya sido el último país en enviara Bruselas, tarde y mal, los papeles con las propuestas para cofinanciar losplanes de empleo juvenil?', ha preguntado el portavoz socialista. 'Lo han
hecho, además, sin conocimiento de esta cámara y sin el acuerdo de los interlocutores sociales. Esa actitud solo indica desidia e incompetencia', ha sentenciado a continuación.

En su arranque el debate no ha tenido mucha más historia. El presidente Rajoy ha descrito un panorama positivo en todos los aspectos tratadosen el Consejo Europeo sujeto a debate. Desde las iniciativas aprobadasen materia de defensa hasta 'los avances' para lograr el mecanismo único de supervisión del sistema financiero europeo como defensa para combatir futuras crisis como la que ha afectado a los países de la Unión, especialmente a España. En ese contexto, haciendo historia, Rajoy ha valorado 'el respaldo financiero' - así lo ha definido el presidente del Gobierno - recibido para sanear parte del sistema financiero español.

En este punto Rubalcaba ha exigido que no sea el contribuyente español quien asuma el coste final de esa ayuda-rescate, al tiempo que ha criticado que el fondo previsto para apoyar la supervisión única bancaria que se pondrá en marcha a finales de este año - algo menos de un billón de euros- 'es claramente insuficiente para abarcar la supervisión de 132 entidades bancarias europeas que manejan fondos de 27 billones de euros. Hay que evitar que al final sean los ciudadanos quienes asuman una crisis de este sector', ha dicho.

El líder socialista se ha trabucado a la hora de parafrasear la sentencia del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, cuando enjulio de 2012 dijo que haría 'lo que sea necesario' para defender el euro,lo que supuso el fin de la crisis de la deuda soberana en varios países, entre ellos España. Rubalcaba ha citado a 'mi amigo Bono, quien diría aquello de con una palabra se sanea todo ...', cuando en realidad se refería a lacita bíblica de un centurión a Jesús, en Cafarnaún (Mateo, 8,5-13) cuando dijo que 'una palabra tuya es suficiente para sanar', en referencia a un siervo suyo enfermo.'¡Cuántas desgracias nos hubiésemos ahorrado si Draghi hubiese pronunciado esas palabras un año antes!', se ha lamentado Rubalcaba.

La respuesta del presidente a todos los grupos parlamentarios ha sido larga, el doble de su inicial intervención, porque emplea la técnica decontestar a cada uno de los portavoces con referencias personales. Esohace que el debate político se diluya, incluso en aspectos anecdóticos. La cita evangélica de Rubalcaba (Mateo 8,15-13) a cuenta de las palabras de Draghi ha encontrado su réplica en el presidente Rajoy, quien ha recurrido al evangelio de Juan 1.7 donde se refleja la cita de Jesús que habla de 'quien esté libre de pecado que tire la primera piedra' para sustentar que la bajada de la prima de riesgo española no se ha debido únicamente a aquella intervención del presidente del BCE. '¡Reconozca que algo se deberá a lo que hemos hecho en España!', ha dicho Rajoy un tanto enfadado.

El presiente del Gobierno ha empleado casi todo su segundo parlamento en volver a sacar pecho sobre la positiva evolución de la economía. 'Dije que 2012 iba a ser un mal año, como lo fue, que en la segunda mitad de 2013 iban a mejorar las cosas con una incipiente recuperación, y así ha sido, y que en este año de 2014 iba a crecer el empleo y la economía española. Habrá que reconocerlo, creo yo', ha insistido de nuevo Rajoy. Y sobre el saneamiento del sector financiero y la ayuda europea recibida lo ha querido concretar en el caso de Bankia, y la fuerte inyección dineraria aportada, a la hora de responder a Joan Coscubiela, portavoz de La Izquierda Plural: 'La alternativa a lo actuado hubiera sido dejarla caer: ¿qué hubiera hecho usted con los depósitos de los ahorradores, con los fondos de pensiones, con los Trabajadores?, ¿lo hubiéramos pagado entre usted y yo?'.

Rubalcaba le ha contestado también un tanto enfadado en torno a la polémica sobre quién debe arrogarse el mérito de la bajada de la prima deriesgo. '¿Dejémonos de citas bíblicas, señor Rajoy, a Dios lo que es deDios y al César lo que es de César; dejemos a Draghi la prima de riesgo y a usted las reformas como la laboral que ha precarizado el trabajo y habajado los salarios!', ha clamado Rubalcaba. Para demostrarlo ha exhibidoun gráfico con la evolución de las primas de riesgo española e italiana. '¡Son idénticas, señor Rajoy, idénticas!', ha proclamado. '¡No se ve!', le han gritado esde la bancada popular. 'Yo les enviaré a cada uno de ustedes- los diputados del PP - una copia para que lo vean bien', ha contestado el socialista.

Luego, el resto de portavoces se han visto molestos y hasta enfadados con el optimismo mostrado por Rajoy. El catalanista Sánchez-Llibre haconsiderado 'inconcebible', que el presidente no haya dedicado ni unapalabra a la cuestión de Cataluña mientras que Coscubiela le ha acusado de basar su discurso optimista en 'cifras que no responden a la verdad yque tergiversa para construir un discurso falso'; Rosa Díez le ha calificadode 'triunfalista' antes de recurrir también a una cita bíblica, Jeremías 28,19 sobre el cumplimiento de las profecías. Ninguno de los portavoces parlamentarios ha suscrito sus tesis.