Público
Público

Rajoy pide confiar en el PP pues sabe manejarse ante cualquier circunstancia

EFE

El líder del PP, Mariano Rajoy, ha pedido hoy a sus correligionarios que confíen en las posibilidades y en la fortaleza del partido ante próximas convocatorias electorales, pues ante todo los populares saben "navegar" y "manejarse" frente a "circunstancias de todo tipo".

En un día en el que el "caso Gürtel" y su relación con el tesorero del PP, Luis Bárcenas, ha vuelto a escribir un nuevo episodio -el Tribunal Supremo le ha citado para declarar el próximo miércoles-, Rajoy ha enarbolado la fuerza de un partido, el suyo, que "va bien, bastante bien" y que, por ello, ha de afrontar ilusionado los objetivos marcados, el primero de ellos, las autonómicas y municipales de 2011.

Rajoy ha insistido en que los populares no deben desviarse del camino trazado hacia la victoria, que es lo único que vale al PP, y que ningún "ruido" puede convertirse en distracción.

Hay que perseverar en ese cometido, ha dicho, "y luego surgirá una cosa, la de más allá, la contraria". "Pero -ha continuado- sabemos navegar en circunstancias de todo tipo; ya nos manejaremos".

El presidente popular no ha introducido en su discurso de clausura de la Escuela de Verano del PP ninguna palabra que permitiera entrever claramente una alusión al "caso Gürtel".

Lo que sí ha evidenciado es que las causas judiciales que desde hace un tiempo sacuden los cimientos del PP no afectan a la salud de un partido que ganó en Galicia y en las europeas: "Vamos bien. A algunos no les gusta, pero qué le vamos a hacer, nunca llueve a gusto de todos. Vamos bien, cada vez son más los españoles que confían en el PP".

Y como el Partido Popular está fuerte Rajoy ha precisado los objetivos del próximo curso y a más largo plazo.

De hecho, "el reto inmediato", a su entender, son las elecciones autonómicas y municipales de 2011, que hay que ganar, y para tal fin es fundamental trabajar desde ya, "estar con la gente, cerca de sus problemas y aportar soluciones".

El balance hasta ahora es positivo para el PP -"no hemos hecho mal las cosas"-, pero Rajoy ha reclamado que esta reciente trayectoria de éxitos electorales no lleve a caer en el conformismo; al contrario: debe ser "una muy buena base" para próximos trabajos y objetivos.

Si el Gobierno está perdiendo el caudal de confianza de la gente, el PP, a su juicio, es percibido cada vez más como un partido que conoce las necesidades de la gente.

Así que ha pedido a las estructuras regionales del PP que comiencen ya a buscar candidatos para los comicios de dentro de dos años, y en ese sentido ha recordado que en septiembre habrá una reunión de la dirección con sus secciones autonómicas.

Todo ello sin perder el punto de mira en la crisis y en la forja de una alternativa clara.

En esa alternativa es clave la reforma fiscal, cuyo planteamiento adaptará el PP a la evolución reciente de los efectos económicos para presentar un modelo retocado en septiembre, o la reforma de la educación, cuyo redactado, según los parámetros del PP, también verá la luz dentro de dos meses.

Hay más asuntos: la reordenación del sistema financiero, que en gran medida propiciará fusiones entre cajas de ahorros.

Fusiones en las que, según ha remarcado Rajoy, deben prevalecer los criterios económicos antes que los "políticos o identitarios", de tal forma que no se faciliten sólo las de que afecten a entidades de una misma comunidad autónoma.

Asimismo, ha denunciado que el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no vaya al Congreso a finales de mes a protagonizar un pleno sobre economía y, sin salir de este asunto, ha pedido a CiU y a CC que expliquen por qué han respaldado dicha evasiva.

Los recientes cambios en la dirección del CNI serán otro filón de oposición para el PP, cuyo líder, entre críticas al presidente del Congreso, José Bono, por no permitir el acceso a documentos "no reservados", ha pedido al fiscal general del Estado que investigue las razones que motivaron la dimisión de Alberto Saiz.

Y la financiación autonómica. Rajoy ha censurado el método que ha seguido el Gobierno por su "oscurantismo" y por ser fruto de la negociación con un partido, pero sobre todo por no ser concreto y entendible, toda vez que cada comunidad autónoma cifra de modo diferente lo que recibirá gracias al cambio.

Ha anunciado que nada más reanudarse el periodo de sesiones preguntará a Zapatero en el Congreso por esta cuestión.

En la clausura también ha intervenido el presidente del PP en Andalucía, Javier Arenas, quien ha llamado al esfuerzo de su partido por mostrarse a la sociedad como "un ejemplo en la presentación de alternativas".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias