Público
Público

Rajoy pone deberes a sus posibles ministros de Exteriores y Agricultura

EFE

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que su ministro de Asuntos Exteriores se dedicará sobre todo a defender los intereses de España en el extranjero, pues eso "crea riqueza", y que su titular de Agricultura pasará "tres o cuatro días a la semana en Bruselas".

Resulta noticioso que el líder del PP hable de cómo quiere que sea su Gobierno durante los mítines que está efectuando en lo que se lleva de campaña, pero hoy en Inca, una localidad de la isla de Mallorca que gobiernan los populares, ha soltado dos comentarios.

Tras decir en Leganés que algunos ministrables como Soraya Sáenz de Santamaría, Ana Mato o Alberto Ruiz-Gallardón tendrán con él "mucho futuro político", en este municipio mallorquín ha prometido que nombrará a un ministro de Asuntos Exteriores que "se ocupe fundamentalmente de los intereses de España en el extranjero".

"Esto también crea riqueza, así que menos Alianza de Civilizaciones y más defender los intereses de España", ha añadido.

Tras destacar que si él llega al Gobierno, el turismo tendrá futuro y será objeto de sus prioridades, más que nada porque es "un sector puntero", si no el "mejor del mundo", el líder del PP ha censurado "la alergia" que los socialistas han padecido con la agricultura.

Según sus palabras, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "no ha dado ni una sola batalla" en la UE para fortalecer el campo español, algo que él no hará.

Ha afirmado Rajoy que su ministro de Agricultura -ha dicho en numerosas ocasiones que él volverá a contar con un ministro del ramo- "estará en Bruselas tres o cuatro días a la semana dando la batalla por los intereses españoles".

Como siempre en los mítines de esta campaña, el presidente del PP ha avanzado que formará "un Gobierno competente" de ministros y ministras que "conozcan la realidad" en la que viven.

Asimismo, ha declarado que antes de que acaben los 100 primeros días al frente del Ejecutivo presentará en las Cortes un plan a cuatro años para afrontar la crisis y fijar "un rumbo claro y un calendario", y se acaben así "las ocurrencias y las improvisaciones" que han caracterizado esta última etapa de gestión del PSOE.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias