El director de escena hispano-argentino Rodrigo García estrena hoy "Versus" en el Teatro del Rond-Point de París, una obra en la que parte de la Guerra de la Independencia española para explorar la capacidad del ser humano de vivir en paz y en armonía.

"Versus" llega a la capital francesa dentro del Festival de Otoño de París, procedente de escenarios como el del Festival de Otoño de Madrid, donde fue en 2008 una de las piezas estelares, y del Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz, donde se estrenó en octubre de 2008.

El público de París, que conoce muy bien el trabajo de Rodrigo García, podrá descubrir esta nueva creación suya hasta el próximo día 21.

Los promotores de su programación en el Teatro del Rond-Point subrayan "la feroz energía que recorre" su arte, así como "la estrategia poética que se encuentra en el corazón de su escritura", en particular después de "Fallait rester chez vous, têtes de noeud".

En "Versus", recuerdan, "todo puede comenzar hablando de pizzas, de fútbol", para de repente "entrar en colisión con la Historia" y topar con figuras como Francisco de Goya, sobre la que Rodrigo García ha trabajado ya en abundancia, personajes como Franco y animales como monos.

El artista sabe evocar las relaciones entre humillación y economía, llenar el escenario de contradicciones, y en este caso también libros, maltratados y pisoteados, mostrar un cuerpo a cuerpo para intentar con ello "trastocar nuestra percepción del mundo o saturarla", destacan.

Desde hace años, la escena francesa suele estar salpicada de creaciones de Rodrígo García, quien acaba de dirigir otra de sus obras en Rennes (noroeste) "Muerte y reencarnación en un cowboy", entre el 11 y el 14 de noviembre,

Fue una coproducción de la compañía del artista, La Carnicería teatro y del Teatro Nacional de Bretaña (TNB), donde desde hace años suele mostrar sus creaciones.

El programa del Festival de Otoño Parisiense precisó que "Versus" es una producción de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC), con la participación de Laboral teatro y del Gobierno del Principado de Asturias.

En 2008 la pieza, realizada con total libertad según declaró a los medios el artista, marcó su retorno a España tras diez años de ausencia.