Público
Público

Rosell margina de la cúpula de la CEOE a sus oponentes

El andaluz Santiago Herrero, perdedor de las elecciones, se queda sin vicepresidencia, aunque se deja abierta la puerta a su reincorporación

ANA FLORES

Lo ocurrido con las elecciones a la presidencia de la CEOE se parece cada vez menos al proceso democrático que la patronal decía querer vivir para pasar página a la etapa del polémico Gerardo Díaz Ferrán. Juan Rosell, nuevo presidente de la CEOE, dio a conocer ayer ante la junta a su equipo de confianza, los llamados a ocupar un asiento de vicepresidente en la nueva patronal. Frente a los 21 que nombró su antecesor, Rosell ya avisó hace una semana que dejaría las vicepresidencias en menos de la mitad. ¿Dónde ha estado el corte: tamaño, peso económico, número de vocales en la asamblea de la CEOE...? No. La clave, como se intuía por los nombres que se iban conociendo en los últimos días, ha sido quién apoyó y quién no a Rosell a lo largo del proceso electoral.

Nadie como los rivales de Rosell en las elecciones saben desde ayer que ir contra el aparato de la patronal, cuestionar públicamente su funcionamiento, se puede pagar caro. Tanto el presidente de la patronal andaluza CEA, Santiago Herrero, como el de la tecnológica Ametic, Jesús Banegas, que renunció a la carrera de la presidencia cediendo sus apoyos a Herrero para vencer a Rosell, han perdido sus vicepresidencias.

El nuevo líder premia la fidelidad de Valencia, Aragón, Confemetal y FIAB

Las dudas vertidas especialmente por Banegas sobre la limpieza del proceso electoral y sobre las supuestas intrigas del aparato de la CEOE, con Díaz Ferrán actuando en la sombra, para aupar a Rosell han privado al presidente de Ametic del favor del clan empresarial. A Herrero, al menos, Rosell le tendió ayer la mano ante la junta, abriendo la puerta a su recuperación en el órgano ejecutivo de la CEOE.

Sabe a poco, teniendo en cuenta que el andaluz lidera una de las patronales territoriales de mayor tamaño, sólo superada en número de vocales en la asamblea de la CEOE por la catalana Foment del Treball (45), de la que todavía es presidente Rosell, y por la madrileña CEIM (45). Es más, si se suman los vocales de las patronales de cada una de las provincias andaluzas, la cifra de vocales por Andalucía se iguala al de estas dos (44).

Todavía peor explicación se encuentra en la salida de Herrero del grupo inicial de vicepresidentes tras confirmarse ayer que sí conservan asiento patronales de menor tamaño como la valenciana Cierval (que cuenta con diez vocales propios y alcanza un máximo de 29 si se suman los de las patronales provinciales) o la aragonesa CREA (seis vocales, 12 con las provincias). Estarán representadas por sus respectivos presidentes, Rafael Ferrando y Jesús Morte. ¿Qué comparten Cierval y CREA para haberse hecho merecedoras de una parte de la tarta del poder? Ambas apoyaron firmemente y desde bien temprano a Rosell durante el proceso electoral.

Joan Gaspart será vicepresidente en representación del sector turístico

Pero no sólo en las patronales territoriales se ha visto la limpieza de Rosell. Además de quedar fuera la tecnología o la energía, las sectoriales han asistido estos días a una situación inconcebible hasta hace poco. La mayor organización sectorial, con 40 vocales en la asamblea de la CEOE, la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), no tuvo adjudicado asiento de vicepresidente hasta el último momento. Este será ocupado por el presidente de la CNC, Juan Lazcano.

El pecado de la patronal de este macrosector no parece otro que el comunicado que emitió antes de las elecciones, en el que oficializó que no se decantaba 'formalmente por ninguno de los candidatos en virtud de su pluralidad interna, reconociendo la gran valía de ambos (Rosell y Herrero)'.

Su tibieza le ha costado un aviso a navegantes. No ha sido así con otras sectoriales que hace días, por no decir semanas, sabían que tendrían vicepresidencia, como es el caso de Confemetal (30 vocales) o de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (15). La primera, que protagonizó con su declaración pública de apoyo uno de los grandes espaldarazos de Rosell, estará representada por su vicepresidente Javier Ferrer. Este sustituirá al histórico Carlos Pérez de Bricio, que fue nombrado ayer presidente de honor de la CEOE. FIAB estará representada por su presidente, Jesús Serafín Pérez.

También obtienen vicepresidencia Pilar González de Frutos, por la patronal de seguros Unespa, y Joan Gaspart, que, aunque participa en la junta y en el comité ejecutivo en representación de la catalana Foment del Treball, de la que todavía es presidente Juan Rosell, ha pedido que su puesto de vicepresidente sea en representación del sector turístico. Jesús Terciado, de Cepyme, es vicepresidente por estatutos.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias