El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, calificó el lunes como un "incidente aislado" elapuñalamiento de un varón senegalés en la localidad almeriense de Roquetas de Mar, mientras que el alcalde de laciudad negó que se trate de un brote racista.

El domingo por la noche, la Guardia Civil arrestó a cuatro inmigrantes subsaharianos, en la segunda madrugada dedisturbios después de que el joven africano de 28 años fuera asesinado por causas que aún se desconocen.

"En muy poco tiempo sabremos lo que ha pasado en Roquetas de Mar, habremos detenido al asesino y habremosvuelto a la normalidad", dijo Rubalcaba durante una entrevista con Onda Cero, tras afirmar que se trata de un "incidenteaislado" que no está relacionado con la inmigración.

El alcalde de la localidad, Gabriel Amat, ha negado también que el ataque tuviera a motivaciones racistas.

"No se puede tratar de un caso de racismo ni de otras cosas parecidas", señaló Amat en declaraciones recogidas por

RNE.

Amat hizo un llamamiento a la tranquilidad y destacó que Roquetas de Mar supone "un ejemplo de convivencia".

Un portavoz de la subdelegación del Gobierno en Almería informó de que durante la noche del domingo sereanudaron los disturbios en la localidad y que hubo varios casos de resistencia a la autoridad e intentos de agresión.

Como consecuencia de los incidentes se detuvo a dos ciudadanos de Guinea Bissau y dos de Senegal. El sábadopor la noche fueron detenidos otros cuatro inmigrantes.

Según la información de un testigo, el hombre murió cuando trataba de intervenir en una disputa entre familiassenegalesas y gitanas en la zona. El ministro del Interior señaló que posiblemente el joven intentó actuar comomediador.

Tras la muerte del senegalés, inmigrantes africanos quemaron dos viviendas de familiares del supuesto autor de lamuerte del joven y dos vehículos estacionados en las proximidades.

Aproximadamente un tercio de los residentes en Roquetas de Mar son inmigrantes que trabajan en los invernaderosde fruta y verdura de la zona.