El presidente francés, Nicolas Sarkozy, conversó hoy telefónicamente con su colega chadiano, Idriss Déby, ante quien condenó el intento de los rebeldes de tomar el poder por la fuerza y expresó su apoyo a la unidad y estabilidad del país africano.

El Palacio del Elíseo ha difundido un comunicado en el que informa de que Sarkozy convocó a una reunión sobre la situación en Chad al primer ministro, François Fillon, a los titulares de Exteriores y Defensa, Bernard Kouchner y Hervé Morin, respectivamente y al jefe del Estado Mayor, general Jean-Louis Georgelin.

La nota no da cuenta de lo que Déby le dijo al presidente francés, que en una conversación anterior le había ofrecido ayuda en el caso de que quiera abandonar el poder.

No obstante, sí señala que Sarkozy condena "firmemente" ese intento de toma de poder por la fuerza por parte de "grupos armados procedentes del exterior" de Chad.

El encuentro permitió analizar los acontecimientos en Chad, donde leales a Déby y rebeldes mantienen combates en Yamena, así como las operaciones de evacuación de extranjeros que han querido salir del país africano bajo la protección francesa.

Más de siete centenares de extranjeros han sido ya trasladados por fuerzas francesas desde Yamena a Libreville (Gabón).

De ellos, un total de 199 -130 franceses y 69 de otras 27 nacionalidades- tienen previsto llegar al aeropuerto parisino de Roissy hacia las 23.30 horas (22.30 GMT), a bordo de un Airbus A310 del Ministerio de Defensa, informó esta noche el de Exteriores en un comunicado.

Mientras, un Boeing 777 con capacidad para 440 pasajeros fletado por Exteriores tiene previsto salir de Libreville durante la noche del domingo al lunes, agrega la nota.

París está en contacto con la Unión Africana, que ha encargado al líder libio, Muamar Gadafi y al presidente del Congo, Denis Sasou Ngueso, la búsqueda de soluciones a la crisis.