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Sundance arropa un thriller español

El gallego Rodrigo Cortés estrenará mundialmente 'Buried' en el festival indie

S. BRITO

Si terminar una película es un trabajo de alto riesgo, en el caso de Buried, la nueva cinta del gallego Rodrigo Cortés, la cosa roza el milagro. 'En marzo leí el guión de Chris Sparling, en julio estábamos rodando y al día siguiente de acabada la filmación empecé a montar siete días a la semana durante un mes y medio. Ahora estamos con la mezcla de sonido y la música. Todo para llegar, con suerte, 15 minutos antes de la inauguración de Sundance', cuenta, con los nervios de punta, un excitado Rodrigo Cortés, que debuta en el mercado americano con un thriller claustrofóbico.

No es para menos, su segundo largometraje, tras la premiadísima Concursante (2007), es un ejercicio de estilo de aúpa. Buried cuenta la historia de un hombre que despierta enterrado vivo, atrapado en un ataúd de madera, y con un móvil apunto de apagarse como única vía de salida. 'La película es lo que cualquiera consideraría una insensatez', bromea.

El director gallego tendrá su premiere en la sección Park City at Midnight del festival indie fundado por Robert Redford. La noticia deja pocas dudas del desembarco americano de Cortés: la película, de capital español, está rodada en inglés con Ryan Reynolds (próximo Linterna Verde en la adaptación del cómic al cine) como absoluto protagonista. 'No me siento parte de ninguna generación de españoles que esté asaltando Hollywood, mi vocación es internacional por una razón muy simple: que vean la película el mayor número de personas', matiza.

En el festival, Cortés no estará solo. Otros dos españoles volarán hacia Utah para concursar en la sección World Cinema Dramatic Competition. Son Álvaro Pastor y Antonio Naharro, los directores de Yo también, película protagonizada por Pablo Pineda y Lola Dueñas premiada por partida doble en San Sebastián .

Además, Sundance desveló ayer sus apuestas, entre las que brilla Aullido (Rob Epstein y Jeffrey Friedman), filme con James Franco que dramatiza el juicio por obscenidad al que se sometió Allen Ginsberg tras la publicación de su poema homónimo. Y el actor Mark Ruffalo debutará en la dirección con Sympathy for Delicious, con Juliette Lewis, que regresa al cine.

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