Público
Público

Tres presidentes de África occidental pidieron a Gbagbo que ceda el poder a Ouattara

EFE

Una delegación de tres presidentes de África occidental pidió hoy en Abiyán a Laurent Gbagbo que entregue la Presidencia a Alassane Ouattara y le advirtió que, de no hacerlo, podrían utilizar la fuerza para obligarle.

La delegación, compuesta por Yayi Boni, presidente de Benin; Pedro Pires, de Cabo Verde, y Ernest Bai Koroma, de Sierra Leona, en representación de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), se reunieron con Gbagbo durante tres horas y no hicieron declaraciones al término del encuentro.

Los tres gobernantes tenían la misión de dar a Gbgabo un ultimátum para que abandone el poder acordado por la cumbre extraordinaria que celebró la CEDEAO el pasado viernes en Abuya, que también mostró su preocupación por la violencia postelectoral desatada en el país, donde han muerto al menos 173 personas, según la ONU.

Antes de la reunión con Gbagbo, los tres presidentes se reunieron en un hotel de Abiyán con el enviado de Naciones Unidas en Costa de Marfil, Choi Youn-jin, jefe de la Operación de Naciones Unidas en el país (ONUCI), cuyos 10.000 "cascos azules" tratan de mantener la paz y proteger a Ouattara.

Boni, Pires y Karoma se dirigieron posteriormente al Hotel Golf de Abiyán, donde ha establecido su sede y la de su Gobierno Ouattara, reconocido como presidente electo de Costa de Marfil por la comunidad internacional tras los comicios del 28 de noviembre pasado, lo que no admite Gbagbo.

Ante la amenaza de usar la fuerza para sacarlo del poder, Gbagbo y sus seguidores, que han rechazado la posibilidad de abandonar el poder, han señalado que Costa de Marfil "no es un protectorado de la CEDEAO" y amenazado con una guerra civil y con desestabilizar los países vecinos.

Hoy mismo, el portavoz de Gbagbo, Ahoua Don Mello elevó de nuevo el tono y volvió a acusar a la CEDEAO de "delincuencia política" y rechazó cualquier "imposición" exterior para que Gbagbo deje el poder.

Costa de Marfil, un país dividido desde la guerra civil de 2002 a 2007, con el sur en manos de las Fuerzas Armadas y de seguridad leales a Gbabgbo, y el norte controlado por los ex rebeldes de las Fuerzas Nuevas, que apoyan a Ouattara, teme una nueva violencia.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias