El ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, afirmó hoy que su país está preparado para enfrentarse a "cualquier escenario" ante el agravamiento de la represión en Siria, que ha costado ya la vida a más de 3.500 personas, según la ONU.

"Si continúa la opresión, Turquía está preparada para cualquier escenario. Confiamos en que una intervención militar no será necesaria. El régimen sirio tiene que encontrar una manera de hacer las paces con su propio pueblo", afirmó Davutoglu en una entrevista a la televisión Kanal 24.

A la pregunta de si una intervención militar internacional estaba ahora más cercana, Davutoglu matizó que Turquía no deseaba esa opción y que esperaba que las decisiones de la Liga Árabe y las presiones regionales acabasen con el derramamiento de sangre en Siria, abriendo paso a nuevas reformas.

Agregó que Ankara consideraba preparar una "zona de seguridad" ante una posible avalancha de refugiados que huyan del país vecino y se dirijan a Turquía.

"Si decenas, cientos de miles de personas avanzan hacia Irak, Líbano y las fronteras de Turquía, no solo Turquía sino la comunidad internacional pedirá que se tomen medidas, como una zona de seguridad. No queremos que eso suceda, pero se debe tener en cuenta y trabajar en ese escenario", explicó Davutoglu.

"Ayer y anteayer tuvimos reuniones sobre la crisis en las que consideramos todos estos puntos. Continuaremos teniendo estas reuniones para no encontrarnos con sorpresas y estar preparados ante cualquier situación extraordinaria", aseguró el jefe de la diplomacia turca.

Davutoglu también consideró "correctas" las sanciones que la Liga Árabe impuso al régimen de Damasco, aunque no reveló ninguna medida concreta que Turquía vaya a aplicar contra Siria.

Turquía tiene una frontera de 800 kilómetros con Siria, hasta hace poco considerada un aliado de Ankara, pero la campaña de represión de Damasco contra la revuelta popular ha llevado a que el Gobierno turco pida al presidente sirio, Bachar al Asad, que abandone el poder.

Por otro lado, el ministro de Transporte turco, Binali Yildirim, anunció hoy en una reunión en Ankara que la situación actual de Siria ya ha afectado negativamente al transporte de mercancías desde Turquía hacia otros países árabes.

Yildirim declaró que se va a impulsar el transporte a través de Irak, dejando de lado Siria, un país con el que Turquía tiene un volumen de comercio bilateral de 2.500 millones de dólares anuales.

Varios diarios turcos informaron hoy de que Ankara prepara sanciones contra Siria, pero que las medidas aún deben de contar con el visto bueno del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan.