La Unión Europea (UE) y el Consejo de Cooperación del Golfo (GCC) expresaron hoy su preocupación por la situación en Siria y urgieron al Consejo de Seguridad de la ONU a actuar urgentemente para detener la represión.

"Urgimos a todos los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a asumir sus responsabilidades y tomar medidas urgentes", señaló en un comunicado la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, tras reunirse con el secretario general del CCG, Abdelatif Zayani.

Según Ashton, ambos compartieron su "gran preocupación" por la "escandalosa campaña de represión" del régimen contra el pueblo sirio.

La Alta Representante reiteró una vez más su llamamiento al fin de la violencia y su apoyo a los esfuerzos de la Liga Árabe para detener el conflicto.

El Consejo de Seguridad de la ONU aborda de nuevo hoy la deteriorada situación de los derechos humanos en Siria, con un proyecto de resolución propuesto por Marruecos que pide la salida del poder del presidente sirio, Bachar el Asad, y que cuenta con el rechazo de Rusia.

Los líderes de los Veintisiete ya reclamaron ayer una respuesta en ese foro a la represión de las protestas en el país.

Por otra parte, Ashton presentó también hoy al secretario general del CCG la última ronda de sanciones impuesta por la UE sobre el programa nuclear iraní, que incluye un embargo petrolero, y subrayó que el bloque sigue abierto a negociar con Teherán.

Los dos mandatarios trataron además el proceso de paz de Oriente Medio, Libia, la situación en la región del Golfo y en Yemen.

En el caso de este país, la UE pidió a Abdelatif Zayani que los países de la región sigan cooperando para ayudar a Yemen a superar "sus muchos desafíos".