El electo vicepresidente segundo de Perú, Omar Chehade, anunció hoy a Efe que "es muy probable" que el ex presidente Alberto Fujimori sea trasladado desde el cuartel policial en el que cumple una condena a 25 años de cárcel a una prisión adecuada a la gravedad de los delitos por los que fue sentenciado.

Chehade, que fue el procurador adjunto del Estado encargado del proceso de extradición de Fujimori desde Chile, remarcó, sin embargo, que el gobierno del nacionalista Ollanta Humala, que asumirá la presidencia el próximo 28 de julio, respetará los derechos fundamentales del ex mandatario.

"Evidentemente, lo más probable es que el ex presidente mude de centro de reclusión, a un centro penitenciario ad hoc a una persona que ha cometido graves delitos, lo que no quiere decir que no se va a respetar su salud y sus derechos fundamentales", explicó.

Chehade también ratificó el anuncio que hizo Humala el pasado viernes de que podría concederle el indulto humanitario a Fujimori si su salud se deteriora seriamente, ya que el ex gobernante padece un cáncer a la lengua.

"Como toda persona que sufre un mal o un cáncer terminal, se le va a conceder un indulto o un beneficio, pero para eso primero habrá que ver si Fujimori lo tiene o no, y si es acreedor a recibirlo", explicó.

El vicepresidente electo ratificó que cree que Fujimori, padre de la congresista Keiko Fujimori, la rival de Humala en las elecciones peruanas del domingo, "debería pasar a un centro penitenciario común, respetándole su salud, sus derechos humanos".

"Definitivamente (el cuartel policial de) la Diroes no es un centro apropiado para una persona que ha cometido esos delitos tan graves, que han sido reconocidos por todo el mundo", señaló en alusión a la condena dictada en 2009 por violaciones de los derechos humanos y corrupción.

Chehade también se declaró "optimista y feliz" por el triunfo de Ollanta Humala y dijo que la alianza nacionalista Gana Perú trabajará en los próximos días para "darle tranquilidad al país, a la población".

"No tienen por qué fugarse ni huir los valores económicos ni los inversionistas, los únicos que huirán serán los corruptos, pero de ninguna manera la gente que quiere invertir en el país, nosotros vamos a fomentar más inversiones nacionales y extranjeras", dijo.

Para Chehade, "el único cambio será que ese crecimiento económico se tiene que ver reflejado, traducido, en redistribución de la riqueza".

El político también dijo que el gobierno nacionalista no aplicará "una política de persecución, pero tampoco habrá la política de borrón y cuenta nueva".

"Nosotros trataremos de seguir recuperando los miles de millones de dólares que se llevó la dictadura con Fujimori y (su exasesor Vladimiro) Montesinos a la cabeza, pero tampoco habrá una persecución política ni una cacería de brujas", concluyó.