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El viento complica la extinción del fuego en el que murieron cuatro bomberos

EFE

El fuerte viento y la orografía del terreno están dificultando la extinción del incendio forestal declarado en Horta de Sant Joan (Tarragona) y que el martes se cobró la vida de cuatro bomberos profesionales al quedar rodeados por las llamas debido a un repentino cambio en la dirección del viento.

No obstante, los Bomberos de la Generalitat han conseguido ya estabilizar los frentes más preocupantes por su proximidad a los núcleos habitados y, hasta las 17,00 horas de ayer, la evolución del fuego ha sido "considerablemente positiva", según han indicado los Bomberos de la Generalitat en un comunicado.

Sin embargo, hacia las 17,35 horas, el fuego se ha reactivado y ha sido necesario reubicar a las dotaciones "para que no quedaran atrapados en zona insegura", además, las llamas "se han desdoblado en focos secundarios" hacia el río Canaletes en dirección al Prat del Comte, ha señalado el responsable de mando de los Bomberos, Félix González.

Unas 70 dotaciones terrestres de los bomberos, con un total de unos 200 efectivos, y 21 medios aéreos, así como 200 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) tratan de controlar el incendio, que ha arrasado unas 800 hectáreas de vegetación forestal, parte de ella del parque natural de Els Ports.

La Dirección General de Protección Civil mantiene activada en fase de emergencia el plan Infocat por este incendio y ha recomendado extremar las precauciones ante el temor de que la ola de calor propicie otros fuegos en el resto de Cataluña.

Los cuatro bomberos fallecidos el martes eran vecinos de localidades leridanas, Tremp, Lleida capital, Mollerussa y La Pobla de Segur, cuyos ayuntamientos han decretado varios días de duelo.

Los funerales por las víctimas serán de carácter privado por expresa voluntad de las familias, según indican los Bomberos de la Generalitat. Tres de ellos serán enterrados hoy y el cuarto mañana.

De La Pobla de Segur es también el bombero herido grave Josep Pallàs, que tiene quemaduras en el 75% de su cuerpo, mientras que el otro bombero herido grave, Pau C., sufre quemaduras de segundo y tercer grado en el 50% de su cuerpo y complicaciones multiorgánicas.

Los dos bomberos heridos recibieron ayer la visita del presidente catalán, José Montilla, del conseller de Interior, Joan Saura, y de la consellera de Salud, Marina Geli.

Las familias de las víctimas se desplazaron ayer hasta el tanatorio de Tortosa (Tarragona), donde se encuentran los cuerpos de los bomberos fallecidos.

El juzgado de primera instancia e instrucción único de Gandesa (Tarragona) ha abierto diligencias previas para investigar las circunstancias en las que murieron los bomberos.

El alcalde de Horta de Sant Joan, Angel Ferràs, reiteró ayer sus críticas a la actuación de los mandos de los Bomberos que dirigen el dispositivo para tratar de controlar el incendio.

En declaraciones a EFE, Ferràs (CiU) se mantuvo en su opinión de que el martes se produjo "una cierta relajación" de las personas encargadas de dirigir a los bomberos que trabajan en la zona, al considerar que tenían que haber estado "más atentos" a las condiciones climatológicas, en especial a un cambio en la dirección del viento.

Ante críticas como las del alcalde de Horta, el conseller de Interior solicitó comparecer en el Parlament para dar cuenta de la actuación de los Bomberos de la Generalitat en la extinción del incendio y defender su "profesionalidad".

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