El secretario de movimientos sociales y relaciones con las ONG del PSOE, Pedro Zerolo, ha acusado hoy al Partido Popular de querer hacer de la inmigración "un arma política para inocular el miedo" con un discurso "cargado" de alusiones "xenófobas".

Así se ha expresado Zerolo tras la presentación de la página web "Uruguayos con Zapatero" (www.uruguayosconzp.net), una iniciativa que, según su responsable, Fernando Galán, recoge la suscripción de más de un centenar de ciudadanos uruguayos para "devolver el apoyo" que los socialistas del país latinoamericano recibieron en las últimas elecciones de 2005.

Zerolo ha criticado a los populares por "vincular" la inmigración con "la delincuencia o incluso la insalubridad" con el único objetivo de "generar alerta".

El dirigente socialista ha destacado que todos los partidos políticos, "excepto el PP", han participado en el modelo migratorio diseñado por el PSOE, basado en la "legalidad, control de los flujos migratorios, repatriación de todos los que no cumplen los requisitos para estar en España y lucha contra las mafias".

En este sentido, Zerolo ha mostrado su preocupación por el discurso del PP, "coincidente" con el del controvertido Christoph Blocher, líder de la formación suiza de extremo-derecha Unión Demócrata de Centro (UDC), y con otros miembros de la "senda de la ultra-derecha europea".

El secretario de Movimientos Sociales ha subrayado que "España sigue siendo un país de emigrantes" y que sólo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero lo ha colocado como una nación "más dentro del concierto latinoamericano".

"Hacía mucho que América Latina no miraba a España como un referente positivo", ha proseguido, debido a un "presidente simpático y empático" con el continente y no "antipático", en alusión al ex presidente del Gobierno José María Aznar.

Preguntado por los periodistas por el caso de Pilar Heredia, responsable del Departamento de Minorías Étnicas del Instituto de la Mujer que denunció a Zerolo por acoso laboral, el dirigente socialista ha vuelto a mostrar su "sorpresa e indignación" por "una nota que nada tiene que ver con la realidad".