El secretario de Estado de Economía, David Vegara, reconoció que es "innegable" que el progresivo encarecimiento del petróleo, que está alcanzando niveles récord, "dificulta" la esperada bajada de la inflación.

En rueda de prensa, Vegara mantuvo que la tasa de inflación comenzará a descender en primavera, si bien admitió que el aumento de los precios del petróleo puede afectar no tanto al perfil descendente, que se va a producir, como al límite de esa bajada.

Así, aunque insistió en que el Índice de Precios de Consumo podría situarse a finales de año en niveles "cercanos" al 3 por ciento, reconoció que "lógicamente" la evolución del crudo en las últimas semanas "no facilita" este objetivo.

El secretario de Estado de Economía reconoció también que la inflación media de este año será "algo superior" a la de 2007, que se situó en el 2,7 por ciento -la interanual al cierre del ejercicio pasado fue del 4,2 por ciento-, aunque insistió en que sigue siendo "factible" el descenso del IPC a partir de la primavera.

Vegara se mostró convencido de que, a la hora de tomar decisiones sobre política monetaria, el Banco Central Europeo cumplirá con el mandato europeo, que le obliga a atender, sobre todo, la estabilidad de precios, aunque también tendrá en cuenta la evolución económica de los países de la zona euro y a otras cuestiones como la apreciación de la moneda europea.

El BCE, añadió el secretario de Estado, tiene que tener en cuenta todas estas cosas, pero siempre "sobre la base del principal objetivo", que es el control de la inflación.

El banco europeo, que mantuvo los tipos en el 4 por ciento la semana pasada debido a las fuertes presiones al alza sobre la inflación, ha insistido hoy, en su boletín de marzo, que su principal prioridad es "anclar" de manera firme las expectativas de inflación a medio y largo plazo.