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La OPEP estrena el año con un recorte de producción para frenar la caída de precios

EFE

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) inicia el año 2009 con la entrada en vigor de un recorte histórico de su oferta de crudo para apuntalar el reciente desplome de los precios.

En su última reunión ministerial extraordinaria en Orán (Argelia) el pasado 17 de diciembre, el cartel petrolero pactó una histórico recorte de su producción de 2,2 millones de barriles diarios (mb/d).

Así, el grupo de 12 países exportadores de crudo comienza un año complicado después de que la cotización de su barril referencial se precipitara desde su récord de 140,73 dólares a principios de julio, hasta situarse en 34,69 dólares a fines del 2008.

Un año similar de precios extremos y volatilidad sin precedentes experimentaron los crudos Brent y Texas (WTI), referenciales para Europa y Estados Unidos, respectivamente.

El barril de Brent inició el 2008 por encima de los 90 dólares, superó los 145 dólares en julio y cerró el año a 45,59 dólares, y eso que en la última jornada del año subió un 13 por ciento por el deterioro de la situación geopolítica en Oriente Medio.

Lo mismo sucedió con el Texas, que cerró el año a 44,60 dólares por barril, un 14 por ciento más que la jornada anterior, pero un 53 por ciento menos que hace un año.

Pese a la estrepitosa caída del segundo semestre, el crudo cerró 2008 con una fuerte subida en su valor medio: al 30 de diciembre, el precio medio del barril de la OPEP superó los 94 dólares, mientras que en todo 2007 fue de 69,08 dólares.

Es decir, puesto que sus arcas se llenaron en los últimos cinco años de sostenido encarecimiento del crudo, el fuerte abaratamiento sería soportable para los productores si no durara mucho y el petróleo se recuperase en los próximos meses.

Pero mientras los consumidores se alegran en las gasolineras al ver una inesperada caída de los precios, que debería contribuir a mitigar los efectos de la actual crisis financiera, los productores temen que el primer retroceso de la demanda mundial de crudo en tres décadas se prolongue por demasiado tiempo.

"El panorama del mercado cambió por completo en el tercer trimestre. Los altos precios provocaron una demanda menor", recordó la asesora especializada JBC Energy, con sede en Viena, en su último análisis del año.

"El viento malicioso de la crisis hipotecaria en EEUU se transformó en una grave crisis financiera, con numerosos importantes bancos de inversiones y gigantes de la industria desmoronándose en los últimos meses", y como resultado, las bolsas se derrumbaron y el petróleo perdió en torno al 75% de su valor máximo, añadió.

A ello contribuyó un considerable aumento de los inventarios (reservas almacenadas de crudo) en varias regiones, incluidos los almacenamientos "flotantes", es decir, en los buques de transporte, así como los datos que certifican un retroceso en la demanda.

De poco sirvieron otros factores normalmente alcistas, como la temporada de huracanes en el Golfo de México, problemas técnicos en la infraestructura petrolera y los cortes de producción de la OPEP.

Todo parece indicar que hace tan sólo seis meses, ni dentro ni fuera de la organización se preveía el derrumbe.

En junio pasado, Arabia Saudí decidió aumentar su producción hasta unos inéditos 9,7 mb/d, para frenar la entonces incesante carrera alcista.

Pero sólo tres meses más tarde, Riad ya se vio expuesta a fuertes presiones para reducir nuevamente la producción para evitar un posible colapso de los precios.

Y así, el grupo decidió de forma gradual recortar su oferta en casi 4,2 mb/d en comparación con la oferta de septiembre, con lo que los once países de la OPEP que participan en el reparto de cuotas (todos menos Irak), deberían producir 24,8 mb/d a partir de hoy.

Eso sí, la propia OPEP estima que los países necesitarán unos 40 días para implementar el acuerdo y no será hasta marzo, cuando el cartel se reúna de nuevo en Viena, que se podrá evaluar el grado de cumplimiento del recorte y su impacto en los precios.

JBC Energy estima que los precios se están acercando a su mínimo y prevé con nuevas subidas graduales, hasta un precio medio de unos 75 dólares por barril en los próximos meses.

Eso se debe, aseguran los analistas vieneses, a los recortes de producción de la OPEP pero también a que Rusia ha decidido cerrar los grifos del crudo y a un esperado repunte de la demanda energética, especialmente en Asia.

Wanda Rudich

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