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Más de 20 intentos en Argelia de prenderse fuego a lo bonzo

EFE

Los intentos de prenderse fuego a lo bonzo de personas desesperadas por sus condiciones de vida en Argelia no cesan de sucederse en diferentes zonas del país y otras cinco nuevas tentativas se registraron este domingo, informaron hoy fuentes locales.

Desde mediados de enero se contabilizan ya más de 20 casos de argelinos, entre ellos una mujer, que han intentado quemarse a lo bonzo en todo el país en protesta por su precariedad económica y laboral.

El domingo se produjo el primer intento de este tipo en la capital cuando un hombre en la cuarentena y padre de tres hijos, que participaba en una protesta de desempleados ante el Ministerio de Trabajo, se roció de gasolina e intentó prenderse fuego, lo que fue impedido por un agente de Policía y un periodista que cubría la manifestación.

Empleado de una empresa estatal de limpieza pública, el suicida frustrado percibe un salario mensual de 5.000 dinares (cerca de 50 euros) en un país donde un kilo de carne cuesta en torno a 1.200 dinares y el coste general de la vida es solamente algo menor que en un país europeo.

En la ciudad de Tlemcen, en el oeste del país, Omar Uassini, de 48 años y también con tres hijos, intentó igualmente quemarse a lo bonzo ante la sede del Gobierno regional tras haber sido despedido de su trabajo en un ayuntamiento de la zona.

Un joven parado sin techo de 30 años trató también prenderse fuego en Tazgheit, en la provincia occidental de Mostaganem, en protesta por sus condiciones de vida, mientras que en Bumerdés, en la región de la Cabilia, un hombre de 36 años hizo lo propio tras el rechazo de las autoridades locales a concederle una vivienda.

Asimismo, en Anaba, en el extremo oriental del país, junto a la frontera con Túnez, un joven intentó poner fin a su vida tras haber sido excluido de una lista de concesión de viviendas subvencionadas.

El primer caso ligado a la precariedad social se registró en Argelia el pasado 12 de enero cuando Mohcen Buterfif, un parado de 30 años sin vivienda y padre de una niña pequeña se rocío de carburante y se prendió fuego ante el ayuntamiento de Bukhadra, en la provincia oriental de Tebesa.

Buterfif, con graves quemaduras por todo el cuerpo, murió algunos días después en el hospital, al igual que al menos una de las otras personas que han intentado en las últimas semanas acabar con su vida en el país magrebí.

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