El presidente del PP, Mariano Rajoy, se declaró el martes "contento" con la decisión "de sentido común" de abrir una comisión de investigación en la Comunidad de Madrid sobre la supuesta trama de espionaje a altos cargos madrileños de su partido.

Rajoy explicó que el Partido Popular había suspendido su propia investigación ante el paso dado por la justicia y la Asamblea de Madrid en el mismo sentido.

"El problema que tiene un partido es que sólo puede citar a las personas que son de su partido. No tenemos ni la mitad de la mitad, de los medios que puede tener una comisión parlamentaria que además es pública", señaló en una entrevista en la cadena RAC 1.

Rajoy reiteró su exigencia de "transparencia y claridad" en relación con los presuntos casos de espionaje que fueron destapados por el diario El País y que afectarían, entre otros, al vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, y al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, pertenecientes supuestamente a facciones enfrentadas dentro del PP.

El diario atribuyó algunos de estos seguimientos a un grupo de ex agentes policiales y guardias civiles que estarían a sueldo de la Consejería de Interior que dirige Francisco Granados, que junto a la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, han negado rotundamente que se estuviera espiando a compañeros de partido desde su departamento.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, anunció el lunes que el partido había decidido poner "en suspenso" sus pesquisas internas al considerar que no era necesaria la existencia de tres líneas de investigación, después de que Aguirre dijera que aceptaría que una comisión parlamentaria indagara en los hechos.

Un tribunal de Madrid ha abierto también diligencias al respecto por considerar que los hechos podrían ser constitutivos de un delito penal.

"Lo único que quiero es que se sepa la verdad. Los documentos existen porque los ha publicado un medio de comunicación pero no sabemos quien los ha confeccionado, ni quien los ha ordenado", declaró el martes Rajoy, pidiendo en cualquier caso que se respete la presunción de inocencia de las personas.

El líder de la oposición aseguró que no va a fallar a la mayoría que le apoyó en el Congreso del PP el año pasado, y añadió que "lo ideal es que todo el mundo se comporte con la lealtad debida y actúe con sentido común".