La jefa de la diplomacia estadounidense, Hillary Clinton, advirtió el viernes a Corea del Norte de que no tome medidas provocativas y la instó a volver a las negociaciones nucleares, agregando que los relaciones con Washington no mejorarían si sigue insultando a Corea del Sur.

En una rueda de prensa en la capital surcoreana, la secretaria de Estado de EEUU dijo que Corea del Norte debía cumplir los compromisos que asumió de desmantelar su programa de armas nucleares.

También dijo que las recientes amenazas de Corea del Norte de realizar pruebas de misiles eran provocativas y no ayudaban.

"Los logros de democracia y prosperidad de Corea (del Sur) suponen un marcado contraste con la tiranía y pobreza al otro lado de la frontera con el Norte", dijo Clinton en una rueda de prensa con el ministro de Asuntos Exteriores surcoreano, Yu Myung-hwan.

"Corea del Norte no va a tener una relación diferente con Estados Unidos mientras insulte y rechace el diálogo con la República de Corea", agregó, usando el nombre formal de Corea del Sur.

Corea del Norte ha aumentado su retórica agresiva en las últimas semanas, especialmente contra el Gobierno del presidente surcoreano Lee Myung-bak, quien cortó el flujo de ayuda incondicional hacia el Norte cuando asumió su cargo hace un año.

El jueves, Corea del Norte acusó a Estados Unidos de planear un ataque nuclear y dijo que estaba lista para una guerra con Corea del Sur.

Clinton también anunció que había elegido a Stephen Bosworth, un ex embajador de Estados Unidos en Corea del Sur, para que fuera el enviado de Washington en las negociaciones para poner fin al programa nuclear de Pyongyang.

Bosworth asumirá la responsabilidad de las negociaciones de desarme a seis bandas de manos de Christopher Hill, otro alto cargo estadounidense.

El jueves, Clinton advirtió de una posible lucha de poder en el estado comunista y de la posibilidad de una crisis sobre quién podría reemplazar al líder norcoreano Kim Jong-il, de 67 años, quien habría sufrido una apoplejía en agosto pasado.

Se cree que Kim se ha recuperado de su enfermedad, pero salud sigue siendo una gran preocupación.

Las negociaciones entre las potencias regionales para intentar presionar a Corea del Norte para que renuncie a sus intentos de construir un arsenal nuclear, a cambio de que se termine su condición de paria y para recibir ayuda, están paralizadas.

Clinton se encuentra en Seúl en la tercera parada de su gira por Asia, después de semanas en que ha aumentado la retórica de Corea del Norte y de informaciones sobre que podría estar preparando una prueba de un misil de largo alcance que podría llegar a Alaska.