Cerca de la mitad de los jóvenes de entre 15 y 17 años se pasan más de tres horas al día sentados frente a una pantalla, ya sea para ver la televisión, usar el ordenador o jugar a los videojuegos. Así lo revela un estudio elaborado por la empresa demoscópica Creed España para Adolesweb, bajo el título Jóvenes y Sedentarismo. 

El estudio ha sido realizado a través de un millar de entrevistas a padres y madres de entre 30 y 54 años con hijos de entre 6 y 17 años, con el fin de conocer la percepción que tienen acerca del sobrepeso y los hábitos de vida de sus hijos. El 82% de los padres cree que sus hijos desarrollaran hábitos de vida activos y el 70% asegura que sus hijos van caminando al colegio. 

Aún así, la perspectiva para el futuro no es tan optimista, ya que el 95% cree que el sedentarismo empeorará la calidad de vida de sus hijos cuando éstos sean adultos y un 22% ve difícil que dediquen más tiempo al deporte. 

Pese a la cantidad de horas que están los más adolescentes, los niños más pequeños, de entre seis y diez años, pasan menos tiempo a estar delante de una pantalla, siendo un 19% de ellos los que lo hacen menos de una hora al día. 

Para evitar los hábitos sedentarios, los padres buscan alternativas en el deporte y un 33% considera apropiado aumentar el número de horas lectivas de educación física. Esto se debe a que un 7,3% de los padres asegura que sus hijos tienen sobrepeso, siendo esta proporción mayor entre los de 11 a 14 años (un 12%), seguidos de los de entre 15 y 17 años (con un 8%) y los de 6 a 10 años (un 5,5%). 

Según el estudio, el número de horas de educación física impartidas a la semana más habitual es de dos horas y casi todos los niños de entre 6 y 10 años tienen como mucho una. 

Por último, un 35% de los hijos de los padres entrevistados realizan entre una y tres horas semanales de actividades deportivas extraescolares, en tanto que un 25,8% no realiza ninguna actividad deportiva fuera del entorno escolar.