Sin director, sin comité, sin esperanza y hartos, con 'más cansancio que malestar', los galeristas de Arco volvieron a reunirse para actuar todos a una. Ayer, de nuevo sesión extraordinaria, esta vez en el Museo Reina Sofía y convocados entre ellos galería a galería, debían consensuar la respuesta a la invitación de Ignacio González, Vicepresidente y Consejero de Cultura y Deporte de Comunidad, a reunirse con él y Miguel Ángel Villena, responsable del Área de Gobierno de Hacienda y Administración Pública del Ayuntamiento de Madrid, y la cúpula de Ifema.

Los más de 60 galeristas que acudieron a la cita votaron en contra de reunirse con Luis Eduardo Cortés, presidente de Ifema. Quieren reunión, pero no le quieren a él en ella. Las fuentes consultadas por este periódico han preferido no aparecer nombradas, pero aclaran que en ningún momento de la reunión se valoró la posibilidad de pedir la dimisión de Cortés. Simplemente, no confían en él, consideran que les ha traicionado y ahora deben hablar 'con los responsables políticos de Cortés'. 'Entendemos que no se han enterado del problema que tiene Arco con las injerencias de Luis Eduardo Cortés'.

La gran ausente entre todos ellos fue la galerista Juana de Aizpuru, quien en los últimos días fue señalada por el propio Luis Eduardo Cortés para formar parte del futuro nuevo comité. A ojos del resto de directores ha sido una decisión equivocada, 'porque la coloca en contra de la mayoría', aseguran. De hecho, uno de los asuntos tratados es la denuncia que han recibido los anteriores miembros del comité por el Tribunal de Defensa de la Competencia de la Comunidad de Madrid: se les acusa de la pérdida económica de las galerías no admitidas por su selección. 'Eso es un juego muy sucio. Nos culpan de cumplir con la tarea que se nos enconmendó: seleccionar', asegura uno de los seis damnificados.

'Cortés y su equipo son profesionales de la intriga, de la manipulación y el engaño. Ya no nos fiamos. Somos sus clientes, pagamos por nuestros metros cuadrados en la feria y queremos hablar con sus responsables', apuntaba otro galerista muy enfadado. El ambiente está muy crispado y sobre la mesa está la fuga de Arco.

Los días corren en contra de Ifema y la feria, porque siguen sin director y se debe abrir el plazo de inscripción de galerías, crear los estatutos y el comité de selección. 'Acelerarán el nombramiento esta semana', explicaban los más preocupados. Algunos descartaban ya a Carlos Urroz de las apuestas ante el panorama que tendría que encarar. Sin embargo, el propio Urroz confirmaba a este periódico que 'eso lo decidirá Ifema'. 'Yo no soy tan radical en el no'.