Público
Público

La tragedia de la hija revolucionaria de Allende

La periodista y escritora española Margarita Espuña publica una biografía novelada sobre Beatriz Allende, que nunca pudo superar la muerte de su padre el 11 de septiembre de 1973 y acabó suicidándose cuatro a&ntild

EFE

El silencio existente en torno a la figura, la vida y el trágico final de Beatriz 'Tati' Allende, la hija revolucionaria del fallecido presidente chileno , ha empujado a la periodista y escritora española Margarita Espuña a escribir una biografía novelada, que acaba de ser publicada en España.

Con el título Tati Allende, La hija revolucionaria del presidente chileno (publicada por RBA), Espuña reconstruye los últimos años de esta mujer, que acabó con su vida en La Habana en octubre de 1977, cuatro años después del golpe de estado de Chile contra su padre, Salvador Allende.

Licenciada en Medicina, casada con un cubano miembro de los servicios de inteligencia, recibió en su juventud entrenamiento militar en Cuba y participó en las guerrillas de apoyo al Che Guevara y en los movimientos izquierdistas chilenos, con una gran actividad en la clandestinidad.

Espuña sostiene en su libro que Tati, muy próxima a Allende con quien colaboraba en temas políticos, no pudo superar la muerte de su padre y hubiera deseado morir junto a él en el Palacio de la Moneda, de donde fue obligada a salir, junto con su hermana Isabel, el 11 de septiembre de 1973, el día del golpe.

Cada vez hay mayores sospechas de que fue víctima de un matrimonio que pudo haber sido urdido por los servicios secretos cubanos para tener a alguien en el entorno más próximo a Salvador Allende

Su vida 'quedó paralizada aquel 11 de septiembre. No sabe cómo seguir viviendo en un mundo en el que Chicho (Salvador Allende) ya no está', escribe la novelista en el libro, que imagina cómo fueron los últimos días de la atormentada etapa final de Beatriz Allende antes de suicidarse, a los 34 años, en La Habana.

Espuña refleja cómo, en medio de una inmensa sensación de soledad y abismo interior, Tati sobrevivió cuatro años a su padre en la isla caribeña, donde su matrimonio naufragó y no pudo tampoco ver cumplidos sus deseos de unir la izquierda chilena.

Abandonada por su marido, con cada vez mayores sospechas de que fue víctima de un matrimonio que pudo haber sido urdido por los servicios secretos cubanos para tener a alguien en el entorno más próximo a Salvador Allende, el libro imagina la decepción de Tati y su desamparo.

Espuña destaca que los cuatro años que Tati vivió en Cuba tras el golpe en Chile fueron terribles para ella, que se sintió 'defraudada por sus propios compañeros chilenos', y a la vez 'forzosamente tuvo que vivir un desengaño bastante generalizado con la revolución cubana', aunque 'este desengaño no se puede demostrar', apunta la novelista.

La escritora, autora también del libro Lágrimas rojas. Tania, compañera del Che, basada en la guerrillera Tamara Bunke, intentó sin éxito la colaboración de la familia de Tati para escribir el libro.

Su hermana Isabel justificó la negativa en que no deseaba recordar esos episodios porque le producían mucho dolor.

Según Espuña, pudo pesar el hecho de que se trataba en realidad de una 'familia desestructurada', en la que Tati se sentía 'muy cercana a Payita', la secretaria-amante de Salvador Allende.

Tampoco quiso colaborar la Fundación Allende, comenta Espuña, 'ni siquiera con la aportación de documentos oficiales', lo que la lleva a reafirmarse en su tesis de que Beatriz Allende es 'la gran silenciada en Chile'.

Alejandro, el hijo de Tati, sí le escribió haciéndole llegar su apoyo.

Para Espuña hay dos momentos claves en la vida de Tati, que quedan reflejados en el libro.

Uno de ellos tuvo lugar cuando tuvo que salir de La Moneda el 11 de septiembre de 1973, obligada por su propio padre, 'con ese legado político que le transmitió, que seguramente fue lo que determinó su final al no verse capaz de reconstruir la izquierda chilena', explica la autora.

Otro, precisa, 'el momento brutal en que llevó a los niños al colegio por última vez' justo antes de acabar con su vida, dejando una larga carta de nueve folios, que fue entregada a Fidel Castro.

La escritora considera que 'la gran incógnita' es si su vida y su final hubieran sido diferentes, si hubiera logrado irse de Cuba y hubiera podido vivir en otro entorno.

La biografía de Tati Allende será publicada también próximamente en Argentina y Chile.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?