Público
Público

"Nuestros demonios están siempre ahí, es difícil deshacerse del pasado"

El cineasta canadiense compite en San Sebastián con 'Enemy', una adaptación al cine de 'El hombre duplicado' de Saramago, con Jake Gyllenhaal en el doble papel principal

 

BEGOÑA PIÑA

El cineasta canadiense Denis Villeneuve advirtió en la magnífica Incendies  de la peligrosa herencia que recibimos del pasado. Ahora, con Ememy, la adaptación al cine de la novela de José Saramago, El hombre duplicado, vuelve a lanzar un aviso, 'un aviso moral', puntualiza. 'Esta película funciona como una especie de aviso moral, advierte de que nuestros demonios están siempre ahí, en el fondo, y de que es muy difícil deshacerse de nuestro pasado'.  La película, una coproducción con participación española, que está dentro de la competición de la sección oficial, no es la única del canadiense, que hace doblete en el festival y presenta también Prisoners.

Jake Gyllenhaal (Brokeback Mountain) es el protagonista de ambas películas presentes en el certamen. En Enemy es dos personajes a la vez, o dos versiones del mismo hombre. Un profesor de Historia en la Universidad y un actor de tercera con un lado muy oscuro. 'A Jake Gyllenhaal le atraía especialmente la idea de hacerse adulto de verdad'.

En el fondo sus películas hablan de lo mismo, de cómo mejorar, cómo hacerse mejor persona, ¿no?

Sí, en Incendies desde luego hay algo de eso y en Enemy también, pero ésta es más un aviso moral , advierte de que nuestros demonios están siempre ahí, en el fondo, y de que es muy difícil deshacerse de nuestro pasado. Y Prisoners... creo que las tres hablan de lo mismo pero desde ángulos diferentes. Hablan del poder del pasado y sí, de mejorar. Para mí, mejorar tiene mucho que ver con ser adulto.

Eso vale para el individuo y para la sociedad. ¿Debe la sociedad occidental mejorar, hacerse adulta?

Definitivamente. No sé en España, pero en Canadá tenemos desde hace cinco años un gobierno conservador que no actúa desde la sabiduría, sino siguiendo un instinto casi infantil. Tenemos nuestros propios demonios. Yo creo que las buenas historias tienen resonancia en diferentes niveles, en el individuo, la familia, la sociedad... Y el pasado da siempre para buenas historias.

¿En ciertas situaciones hay que desprenderse del pasado?

Sí. Creo que de eso hablan estas películas, hay mucha gente que se siente atrapada en su pasado y que lo que quiere es ser libre. Hay mucha gente en el mundo buscando su libertad.

Enemy explora el subconsciente de un individuo con doble vida y un lado muy oscuro, ¿le interesaba indagar en esas vertientes distintas que tenemos todos o en ese personaje en concreto?

Lo segundo, me interesa saber si tenemos control dentro de nosotros mismos, qué decisiones del pasado afectan a nuestro presentes y qué vertiente es la que toma las decisiones. Esas decisiones tienen consecuencias en nuestra vida y en la sociedad también. Tener esto bajo control es complicado, porque el poder muchas veces no viene de la sabiduría, sino de la influencia subconsciente de nuestro pasado.

La película subraya la paranoia del personaje...

Son esas dos fuerzas dentro de ti e identificar cuál de ellas es la que está hablando en cada momento. De ahí viene la paranoia. El personaje quiere mejorar, ser un adulto realmente. Esa idea le encantó a Gyllenhaal.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?