El sector cultural español también acusa la crisis económica: el año pasado sufrió el aumento del paro en un 5,8% con respecto a 2008 y la temporalidad mantiene 'tasas significativamente altas, de más del 20%', según los datos publicados ayer por el Anuario de Estadísticas Culturales del ministerio. Respecto del perfil de los trabajadores que emplea el sector, 'las diferencias más significativas se registran por el nivel de estudios, con una formación superior a la media', precisa el estudio.

El peso del sector cultural respecto a la economía en general coincide en cuanto a número de trabajadores y porcentaje del PIB: un 2,9% del total, en ambos casos. La cultura es también un motor importante para otros sectores de vital importancia de la economía española, como el turismo.

Casi el 14% de los viajes interiores de ocio se realizaron principalmente por motivos culturales. Un porcentaje parecido al que supone la llegada de turistas desde el extranjero: 5,7 millones; un 13,% del total. Las actividades culturales, aunque no fueran el motivo principal del viaje, estuvieron presentes en el 48,5% de los realizados por los residentes en España, y en el 53,8% de las visitas que llegaron desde el extranjero.

Esta es la sexta edición de este anuario, que el ministerio elabora a partir de diferentes fuentes, sobre todo el Instituto Nacional de Estadística.

Uno de los datos más significativos del freno económico dentro del sector cultural afecta a los creadores. La recaudación de las entidades de gestión de derechos de propiedad intelectual en 2009 bajó un 13% respecto al año anterior.

Ese fuerte descenso unos 457 millones recaudados en el total del año pasado rompió por primera vez la tendencia que se venía observando desde el año 2000. La mayoría de esos ingresos correspondieron a entidades de derechos de autor (un 75,2%); el resto se repartió principalmente entre las gestoras de derechos de artistas, intérpretes o ejecutantes (13,6%) y los derechos de los productores (11,2%).

En 2008, el gasto medio de los hogares sumó 997 euros, un 2,3% menos que el año anterior.