Público
Público

Río se queda sin Ciudad de la Música

Pese a las promesas de Lula, la ciudad brasileña paraliza las obras del recinto

GUILLAUME FOURMONT

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, prometió el pasado 29 de diciembre que su país resistirá a la crisis financiera y que no sufrirá recesión ni desempleo. Tres días después, el 1 de enero, 3.000 obreros de Río de Janeiro no pudieron regresar a su lugar de trabajo. El alcalde de la capital carioca decidió suspender las obras de la Ciudad de la Música, a pesar de su inminente inauguración.

'Vamos a reducir en un 30% los cargos en comisión de la Administración municipal, con excepción de las áreas y educación', anunció el pasado día uno de enero Eduardo Paes, alcalde de Río. También decidió la suspensión de los contratos, pagos y obras de la Cidade. Las autoridades municipales apuntaron la crisis como única responsable de una decisión que, sin embargo, desvela luchas políticas entre partidos locales.

La Ciudad de la Música es una gigantesca construcción en Barra da Tajuca, barrio residencial del suroeste de Río, en el medio de un terreno de más de 95.000 metros cuadrados. El arquitecto, el francés Christian Portzamparc, no se había mostrado entusiasmado por la localización, aunque pensó en un centro que estaría como flotando en los aires, desde el cual se podría 'descubrir las montañas, el mar y la ciudad', explicó al diario Le Monde.

El padre del proyecto es el ex alcalde de Río de Janeiro, Cesar Maia, del Partido Liberal. Cuando empezaron las obras, en 2002, el coste inicial se estimaba en 80 millones de reales (unos 25 millones de euros). Seis años después, el Ayuntamiento desembolsó nada menos que 518 millones de reales (160 millones de euros)... y el constructor pedía 80 millones de reales más para terminar. En la prensa brasileña, el futuro de la Cidade era objeto de duros ataques por parte de la entonces oposición, el Partido del Movimiento Democrático (PMD), de Eduardo Paes.

El pasado 1 de enero también fue la toma de posesión del nuevo alcalde de Río, elegido en octubre pasado. Cesar Maia perdió y Paes, cercano a Lula, ganó. Decidió suspender durante al menos cuatro meses las obras para estudiar nuevas condiciones de financiación y la validez del proyecto.

Mientras el cotidiano O Globo defiende las grandes cualidades musicales de la Cidade, la Folha de Sao Paulo denunció usos fraudulentos de los presupuestos. Maia canceló la inauguración prevista en diciembre y se celebró un concierto al que no asistió Paes. El arquitecto Portzamparc dejó claro que su equipo no era responsable de la gestión de los gastos y se mostró optimista en cuanto a la apertura del centro. Indicó que visitará en los próximos días las obras con las nuevas autoridades.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?